"Dile a la alcaldesa que venga que la voy a invitar a una patata". Esta fue una de las peculiares frases que se pudieron escuchar ayer en la Fiesta de las Mujeres, con motivo de la conmemoración del 8 de marzo, en el Salón de los Espejos del Club Nazaret, acto que se adelantó con motivo de las elecciones del día 9. En esta misma cita se entregaron los premios Racimo y Filoxera, a la presidenta de Jerelesgay, Susana Domínguez, y al Foro de la Familia, respectivamente. Esta última entidad no acudió a recoger su galardón.

Más de un millar de mujeres se sumó a esta fiesta, organizada por el Ayuntamiento con la colaboración del Consejo Local de la Mujer, en la que no faltó de nada, especialmente buen humor. Una gran tarta, sevillanas, cervecitas, comida, y un ambiente especialmente divertido y de unión reinaron en una nueva edición, en la que las mujeres seguían reivindicando que se reconociera mejor su papel en la sociedad.

La alcaldesa, Pilar Sánchez, fue la encargada de entregar estos premios, y destacó que esta celebración se hace "porque las mujeres también tenemos derecho a celebrar una convivencia de estas características, para reconocer la labor que se hace en favor de la igualdad entre hombres y mujeres".

Hay que destacar que durante la celebración también se entregó un premio especial a la asociación de las mujeres de la zona Sur, Buena Armonía, "que después de mucha constancia y esfuerzo, ha logrado crear un taller de empleo de trabajos artesanales". A este respecto, la alcaldesa señaló que el movimiento asociativo en los últimos 15 años "ha tenido mucha fuerza en la ciudad".

La primera edil tuvo también palabras de recuerdo para las 17 mujeres asesinadas desde principios de año a manos de sus parejas, y destacó que hay que "seguir trabajando para intentar cambiar y mentalizar a la sociedad. Porque se tiene que hacer un cambio cultural y en las costumbres y desde las instituciones tenemos que seguir trabajando con todas las herramientas posibles a nuestro alcance para erradicar la violencia machista".