Andrés Cabrales o Andrés de Jerez cuando se sube al escenario (Jerez, 1969) cambió hace más de un año Jerez por Burdeos buscando así un futuro mejor. El cante es su pasión y desde hace unos años su modo de vida. Criado en el Chicle y de reconocido estilo agujetero, "para mí es el más grande", el cantaor acaba de hacer un sueño realidad, pues ha grabado su primer disco, trabajo que saldrá a la calle el próximo mes de octubre. Charlamos con él aprovechando sus vacaciones en la ciudad.

-Un día cogió usted el petate y pa Francia....

-(Risas) Sí, hace ya año y medio, parece mentira. Hace tres años conocí en Mont de Marsan a la que ahora es mi mujer y bueno, decidí que lo mejor era marcharme y buscarme la vida allí. Ha sido difícil, porque yo soy una persona de la tierra y me ha costado mucho adaptarme, pero bueno, lo peor ya pasó y estoy muy feliz. A veces echo de menos a mi gente, sobre todo a mi madre, a mi Chicle, pero no me arrepiento.

-¿Y cómo es su vida allí ?

-Bueno, vivo en el campo y estoy muy feliz. La verdad es que poco a poco me estoy abriendo camino en el flamenco, y bueno, este verano por ejemplo he actuado no sólo en Francia sino también en otros países. En fin, como yo digo, poquito a poco. Lo bueno es que estoy aquí al lado y cuando puedo me vengo para Jerez.

-Eso de representar Jerez, porque usted tiene ese nombre artístico, ¿le abre puertas?

-Si te digo la verdad sí, aunque a veces sólo eso no sirve. Yo decidí ponerme ese apellido artístico, como Agujetas o Terremoto en su día, y la verdad es que no me arrepiento. Es una responsabilidad, pero por ahora la llevo bien. A mí lo que realmente me ha abierto muchas puertas fue participar en el Festival de Jerez hace unos años. Aquello fue un trampolín, y tengo que estar agradecido a todos los que confiaron en mí.

-Acaba de terminar su primer disco, háblenos de él.

-Sí, estoy muy contento, porque además he tenido la suerte de grabar en uno de los estudios más importantes de Francia, allí ha grabado hasta Paco de Lucía. La idea surgió de mi amigo Samuel Rouesnel, que artísticamente se llama Samuelito. Él es guitarrista, le encanta Jerez y bueno, ha sido quien abrió el proyecto de crowdfunding para grabar. Así nació todo.

-¿Y cuándo saldrá al mercado?

-La idea es que salga para el mes que viene, porque ya está todo listo. Se llamará 'Arañando el alma' y bueno, son ocho cantes que he hecho entre los que hay una soleá por bulería, tarantos, soleá, varias bulerías, tiengos-tangos, y unos corridos del Negro del Puerto que me encantan.

-Supongo que será como un sueño hecho realidad...

-Hombre, es algo grande, nunca pensé que iba a poder realizar este disco. Sinceramente, ya tengo ganas de verlo en la calle, aunque ya aquí en Francia se han interesado varias peñas para presentarlo. Personalmente, todo me está pasando muy deprisa, por eso a veces me cuesta asimilar las cosas.

-¿Y cómo está el flamenco en Francia?

-Hay mucho trabajo, no me puedo quejar. He trabajado en París, pero también en otras ciudades como Nantes o Burdeos. Aquí hay mucha afición al flamenco, y ten en cuenta que hay mucho emigrante y eso se nota. También he dado algunos cursos, porque a la gente le gusta mucho el sello de Jerez que tengo, eso me ha abierto muchas puertas. Lo importante es respetar a los compañeros y yo los respeto, porque trabajo hay para todo el mundo.

-Para usted Agujetas ¿sigue siendo lo máximo?

-Yo siempre he dicho que para mí Manuel Agujetas ha sido un grande y a la vista está lo que ha dejado. A mí me encanta. Luego, por el contacto que he tenido en la Plazuela y en el Chicle he aprendido cosas del Chalao y del Viejo Agujetas, de hecho en el disco les he dedicado unas cositas.