Más allá de lo que ocurra con el pleno donde se debata el presupuesto municipal, que aún no está convocado, este jueves se celebrará la sesión ordinaria correspondiente al mes de marzo. En ella, el gobierno local tratará de aprobar la supresión de las bonificaciones que tienen algunos impuestos municipales ya que así lo obliga un real decreto aprobado hace cinco años por el Ministerio de Hacienda.

El ejecutivo ya intentó esta eliminación el pasado mes de octubre pero entonces contó con el rechazo de la oposición en un momento de crisis en la relación entre PSOE y sus socios de investidura, especialmente, con Ganemos. Sin embargo, y ante la obligación legal de llevarla a cabo, el gobierno anunció que volvería a intentarlo.

Y esta segunda oportunidad la tendrá en el pleno de este jueves. No obstante a esta sesión solo llevará la supresión de las bonificaciones que tienen dos tributos, la plusvalía (el impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana) y el de construcciones. El edil de Economía, Santiago Galván, señaló a este periódico que estos cambios podrán entrar en vigor una vez se aprueben de manera definitiva.

Por el momento, no se pueden hacer modificaciones de los otros dos que se rechazaron meses atrás, las del IBI y las del IAE, puesto que cualquier cambio al respecto solo pueda entrar en vigor por ley a principios de cada año.

Para este ejercicio, la Delegación de Economía estima unos ingresos de unos 14,5 millones de euros en plusvalía y unos 1,6 millones en construcciones.