"Con mucho miedo, aquí hay gente aterrorizada". Así se encuentran los vecinos de la zona residencial de Montealto, que lejos de la tranquilidad que se supone en la zona están viviendo unos días llenos de pavor. El robo de la última semana en unos de los chalés ha hecho que salten las alarmas y ha vuelto a poner en jaque a unos vecinos que se reunirán probablemente el lunes próximo en un colegio de la zona para debatir como tema único la seguridad. Ese terror es mayor porque los últimos atracos, el de hace unos días y otros anteriores -incluso en una casa cerca de la jefatura de la Policía Local-, vienen cargados de una gran violencia.

Así lo confirmó a este medio Juan Manuel Pardo, el presidente de este colectivo vecinal, que reclama más presencia policial, en especial por la noche, para evitar que se vuelvan a repetir incidentes como el de la semana pasada, cuando una familia se vio amenazada por varias personas con hachas tras lograr acceder a su propia casa. "Hace unos meses -como recuerda Pardo- se produjo otro robo con tintes dramáticos y tuvimos una reunión con los responsables de seguridad. Se nos dijo que la Policía no podía vigilar a pie, pero sí hubo un coche patrulla que hacía una ronda con regularidad". Pues bien, parece que la intención de estos jerezanos es que ese control rutinario, que puede ser disuasorio para quienes se dedican a este tipo de asaltos en domicilios, vuelva a darse.

La zona residencial de Montealto es bastante extensa, ya que limita con León de Carranza, la carretera de circunvalación y la avenida María Auxiliadora. Los vecinos cuentan con un servicio de vigilancia privada que hace ronda continua por la zona, pero ni aún así se han conseguido evitar estos sucesos.