Al menos 7 civiles murieron este míercoles y otros 14 resultaron heridos por la caída de cohetes disparados por facciones armadas islámicas en zonas bajo el control de las autoridades en Alepo, la mayor ciudad del norte de Siria, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos. 

La ONG precisó que los proyectiles impactaron en el barrio de Al Yamilia y en los alrededores de la plaza de Saadalá al Yaburi, en manos de los efectivos gubernamentales. 

Los grupos armados opositores también tuvieron como blanco concentraciones de sus oponentes en el pueblo de Al Tamura, en la periferia septentrional de Alepo. Mientras, en el sureste de la provincia homónima, continúan los combates intensos entre el ejército y sus aliados y la organización terrorista Estado Islámico (EI), después de que los yihadistas arrebataran este martes a los soldados el dominio de la estratégica localidad de Janaser. 

Este pueblo es importante porque está junto a la carretera que une los distritos en poder del régimen en la urbe de Alepo con partes del centro y el oeste de Siria, también bajo su control. 

El Observatorio destacó que en las últimas veinticuatro horas al menos veinte combatientes del EI han perdido la vida por bombardeos de supuestos aviones de Rusia, aliada del Gobierno de Damasco, contra Janaser. 

La violencia ha aumentado en Alepo desde el pasado 1 de febrero, cuando el Ejército inició una ofensiva en la mitad septentrional de la provincia contra el Frente al Nusra, filial de Al Qaeda en Siria, y sus aliados. 

Las Fuerzas Armadas también se enfrentan en el este de Alepo al EI, que tiene el dominio de varias localidades. 

El EI y el Frente al Nusra han quedado fuera del acuerdo anunciado por Rusia y EEUU para un alto el fuego entre el régimen y la oposición, que está previsto que comience la medianoche del 27 de febrero.