Su obra ha contribuido a enriquecer de forma notable el patrimonio literario en lengua española. Así, tan claro y tan profundo. Tan escueto y con tanta historia. Así define el ministro de Cultura el galardón que hoy recibe José Manuel Caballero Bonald, el Premio Miguel de Cervantes. El escritor jerezano suma un reconocimiento más, una ovación de un país que se rinde a sus letras, que se emociona con sus libros y que los cierra con la sensación de ser un poco más feliz.

Desde hoy, Caballero Bonald se codea en la ilustrada lista de galardonados con Jorge Gillén, Dámaso Alonso, Rafael Alberti, María Zambrano, Miguel Delibes, Vargas Llosa, Camilo José Cela y Francisco Umbral, por nombrar sólo a ocho de los 38 galardonados a lo largo de la historia del Cervantes.

La cita de hoy es tan importante que fue Bonald el que hizo ayer hasta reaparecer al Rey ante las cámaras tras mes y medio de su operación de hernia discal. En el despacho de Zarzuela, y acompañado por la Reina, don Juan Carlos recibió al escritor (también junto a su esposa), y bromeó diciéndole entre risas "tengo unas ganas de estar como usted ya...".

La agenda del 'Cervantes jerezano' es de locura. Llamadas, actos, almuerzos protocolarios, homenajes, entrevistas, semblanzas... Pero Bonald sigue siendo el de siempre. Hace pocos días concedía una entrevista a este Diario en la que reconocía que "si el hecho de recibir el Premio Cervantes me hiciera distinto al que soy, es que en absoluto me merecía el Premio Cervantes".

Bonald se hizo poeta porque, como él mismo ha dicho, antes había leído a unos poetas que le emocionaron, que "me abrieron las puertas de una nueva sensibilidad"; y se hizo escritor porque es un "aventurero frustrado". Gracias a esos libros que acabaron en sus manos cuando aún era un niño, hoy este jerezano entra en la Universidad de Alcalá de Henares con un discurso de "un Cervantes poco transitado, de cuando aún no había tenido éxito". Lejos de ser amante de las ceremonias solemnes, Caballero Bonald sube hoy a recoger un premio, el Premio. Hoy, José Manuel Caballero Bonald es el protagonista de la literatura.