Cultura

Flamenco entre España y California

  • La Sala Compañía acogió ayer la proyección del cortometraje 'Dos calles y una chica', un trabajo en el que la norteamericana Eve A. Ma ha querido rendir tributo a Jerez con el cante de Antonio Malena

Una diseñadora de trajes de flamenca que se asienta en Jerez y una norteamericana de California apasionada por el flamenco que también acaba en esta ciudad. La norteamericana es Eve A. Ma, que ayer presentó en la Sala Compañía su cortometraje 'Dos calles y una chica'. Esa chica es la protagonista del corto con la presencia omnipresente del flamenco de Antonio Malena.

El cantaor jerezano no faltó ayer a la proyección y explicó cómo surgió toda esta historia. "Eve -cuenta- es la directora de este proyecto y la conocí en San Francisco, donde estaba yo dando un curso de cante y llevé mi espectáculo 'Jerez puro', con María del Mar Moreno de invitada. Estuvo en mis clases aprendiendo a cantar, luego se vino a Jerez en busca del flamenco y contactó conmigo. A raíz de ahí me cuenta que tiene un proyecto de hacer una película para contar mi niñez hasta los 14 años titulada 'Calzoncillos de chocolate' y aunque no me dedico al cine llevamos ya cuatro años haciendo cosas". Concretamente, Malena ha sido director de música y asistente de producción de este corto protagonizado por Adela Olmos.

Pero no es esta la primera vez que Eve se embarca en esta aventura: Lleva ya diez años en el mundo del cine y creó la firma 'Palomino Productions' para llevar a cabo sus propios proyectos.

En 'Dos calles y una chica' Malena aporta su cante por soleares, bulerías y su hijo es el que toca la guitarra y el que hace el guión musical de este proyecto. "Todo lo que sale en el corto -dice el cantaor- es Jerez".

Pero, ¿cómo puede una norteamericana querer cantar flamenco? Malena lo tiene muy claro: "Todo el mundo -dice- tiene cabida dentro del cante, el baile y el toque, sea gitano, francés, inglés o alemán. En el flamenco le abrimos las puertas a todo el mundo. Si cualquier persona tiene corazón, siente y sufre, ¿por que no va a poder cantar, bailar o tocar la guitarra?"

Por su parte, Eve cuenta que 'Dos calles y una chica' "es un homenaje a Jerez porque vine aquí hace cinco años, me encanta la ciudad y me hace pensar mucho en mi niñez porque yo crecí en Nueva Orleáns, que antiguamente era también una ciudad española". Hace dos años, estando ya en Jerez, cayó enferma, "no de gravedad -explica- pero no podía salir y fue entonces cuando me di cuenta, mirando constantemente por la ventana, que las calles tienen su propio ritmo y he unido ese ritmo con la historia de la costurera de trajes de flamenca para hacer 'Dos calles y una chica'".

Ahora su próximo proyecto es hacer la película sobre la niñez de Antonio Malena, 'Calzoncillos de chocolate' un título que resulta a priori curioso, pero que tiene también su razón de ser, porque rememora aquellos años en que Malena junto a sus hermanos, ya a punto de ir a la cama y en calzoncillos, saboreaba unas onzas de chocolate pero, cuando entraba su madre, se tenían que limpiar las manos en la ropa interior para que no les pillara en lo que estaban haciendo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios