El Teatro Villamarta acogerá el próximo domingo, 26 de junio, a las 19 horas, el espectáculo de teatro-musical 'Twist por la vida', de carácter benéfico, ya que la taquilla será destinada a Marcos Carribero, un niño de Jerez con tres cardiopatías severas que necesita una operación urgente en Boston. Una cita para todos los públicos que apuesta por la recuperación de la pureza de la infancia y sus derechos con una finalidad educativa y solidaria. Por un lado, pretende concienciar a los padres de la importancia de la educación en valores, que puede condicionar de manera positiva las decisiones futuras de sus hijos; independientemente de las circunstancias que se le presenten en el futuro. Y por otro, quiere mostrar a los niños de manera simbólica la importancia de mantener una actitud firme basada en valores como la bondad, la pureza, la honestidad, la perseverancia, el amor… ante las dificultades de la vida.

El espectáculo, que ha sido organizado a tres bandas con el Ayuntamiento de Jerez, la compañía teatral María Espejo y la Coral Polifónica Capuchinos de Jerez, cuenta con la dirección escénica de Fernando Navarro y la musical de Jesús Gayoso, y la producción de PUSH Events y Escuela María Espejo, cuyos alumnos de alto nivel interpretan la obras, que está musicalizada por la Coral Polifónica Capuchinos, que aportará el coro y la orquesta, y que agradece el patrocinio de entidades como la Fundación Jaime Gonzalez-Gordon y Multison, entre otros.

La idea del espectáculo parte de la vida de Oliver Twist, el famoso personaje de Charles Dickens. En su obra, Dickens hace un magnífico retrato de la explotación infantil y el uso de menores para cometer delitos en el Londres del siglo XIX. Desgraciadamente, dos siglos después, la explotación laboral y criminal de los niños sigue siendo una realidad en nuestros días. Muchos niños en nuestro mundo son obligados a trabajar, a mendigar y a cometer actos delictivos para beneficio de adultos que no se preocupan de su futuro. Teniendo en cuenta estas circunstancias, a los productores les surgieron varias preguntas: ¿qué hace diferente a Oliver de los otros niños oprimidos?, ¿por qué lucha por salir de ese mundo de miseria y delincuencia al que parece ser arrastrado continuamente?, ¿de qué manera influyeron sus padres y su propia naturaleza en las circunstancias de su vida?

Una estética marcada por el color blanco tanto en la escenografía como en el vestuario de todos los personajes, recuerda continuamente la pureza original del personaje. La obra está cargada de simbolismo y por ello las circunstancias negativas que rodean a Oliver adoptan la forma de telas colgantes de color negro que dificultan el movimiento al personaje. Asimismo el resto de colores llegan de la mano de algunos personajes que inundan el espacio con pintura de diversos colores durante el espectáculo, brindando a Oliver un abanico de diferentes posibilidades al margen de estas circunstancias negativas, desconocidas para él hasta el momento.

Al ser una obra con muy poco texto, la música cobra vital importancia, pues se convierte en el hilo conductor de la historia. Es el soporte de las emociones de los personajes; una vía directa para llegar al alma del espectador. Por esta razón, se hace necesaria la participación en directo de coro y orquesta a lo largo de todo el espectáculo.