Ya va llegando el veranito, y no sólo porque las temperaturas hayan subido y las playas ya estén empezando a sufrir la invasión de todos los años, sino también porque en los cines ya empieza a notarse la llegada de los filmes propios de estas fechas, aprovechando las inminentes vacaciones. Como todos los junios, la cartelera ha estado más bien sesteando, a lo que ha ayudado el fenómeno Piratas del Caribe, que ha mantenido a las exhibidoras lejos de las salas ante el presumible -y cierto- chorreo de gente para ver las nuevas aventuras de Johnny Depp. Pero a partir de este fin de semana la cosa se anima, con su habitual repertorio de secuelas, filmes de animación y algún que otro francotirador que aspira a ser este verano lo que el fenómeno Origen el año pasado por estas calenturientas fechas.

Hoy empieza la avanzadilla estival con un film que reúne dos de las características que hemos dicho. Es de dibujos animados y es una segunda parte. La de Kung Fu Panda, un éxito de hace tres años que recaudó unos 440 millones de euros en todo el mundo con una fórmula irresistible. Mezclar los clásicos animales que tienen rasgos humanos, el cine de artes marciales, una de las fuentes de las películas de acción contemporáneas y el humor paródico que han puesto de moda la Pixar en el mundo de los Dibus y sus réplicas, como Shrek. Además del vil metal, Kung Fu Panda obtuvo una nominación al Oscar, aunque el predominio que tienen sobre la estatuilla los chicos de Lasseter lo hacía imposible, y diez premios Annie, que son como los Oscar particulares del cine de animación. Curiosamente, su productora es Dreamworks, la misma que dio vida al ogro verde, con lo que el antiguo estudio de Spielberg se ha subido al carro del humor para todos los públicos. Sin embargo, un tema extraño es que Guillermo del Toro, uno de estos cineastas mexicanos que según Arturo Ripstein ha nacido en el lado equivocado de Río Grande, es el productor ejecutivo, con lo que parece que está alargando sus inteligentes brazos hacía el mundo de la animación.

La directora es Jennifer Yuh Nelson, que asciende al mando supremo tras ejercer diversos cometidos en el primer Kung Fu Panda Jonathan Aibel y Glenn Berger vuelven a repetir en el guión, tras el buen resultado del film inicial. A los personajes iniciales (el protagonista y los cinco furiosos, Tigresa, Mono, Mantis, Víbora y Grulla) se unen ahora otros nuevos, entre ellos un peligroso pavo real que es el villano de la función. Él es un noble siniestro que parece sacado de una historia de James Bond, ya que pretende conquistar China en toda su amplitud. Y lo que es peor para nuestros amigos, entre sus objetivos se encuentra además eliminar el Kung Fu. Es un contrincante muy peligroso, y Po, el protagonista, se verá obligado a bucear en el pasado de tan temible pavo real para descubrir cómo derrotarlo, en una aventura que contendrá emoción, luchas y humor en adecuadas dosis.

Aunque la gran batalla no será la que propone el guión, sino ver si Kung Fu Panda 2 enamora a las multitudes como la primera y consigue sus marcas en premios y recaudaciones. Por de pronto, tuvo el honor el mes pasado de presentarse en Europa en el selecto marco del Festival de Cannes. No es mal inicio de carrera.