Ayer, el rapero sevillano Tote King estrenó un nuevo un nuevo videoclip. Con una canción titulada 'ellas', se deshacía en elogios a las mujeres. Como se acordaba de madres y abuelas, pues yo pensé en las que me criaron. Sin embargo, al momento y tras ver a diferentes mujeres en el videoclip, vino a mi mente una imagen que había visto días antes en La Granja que me hizo pensar en la brecha digital y el cambio generacional. Una mujer con los 'tubos' en el pelo manejaba su móvil táctil y enviaba una nota de voz de esas que a los nietos nos gusta recibir: "Nene, ¿cómo estás? ¿Has comido? Ten cuidadito si vas a salir luego y no te recojas tarde que tienes que descansar. Venga. Hasta luego. Un beso". Como si Whatsapp fuera un 'walkie-talkie' en el que no se pudiera seguir la conversación; como si el receptor solo pudiera responder una vez y cortar el canal. La de cambios que han tenido que afrontar estas mujeres de un barrio humilde mientras sumaban arrugas; la de veces que habrán tenido que adaptarse al medio para preocuparse por cómo están los suyos. Ante madres y abuelas hay que quitarse el sombrero.