"BUSCAD vosotros conmigo el amor; la ternura, el bosque, el río; la montaña y la gaviota. ¡Buscadlos y buscadme!; Estoy ante vosotros, sumergido en este sobral de ilusión. Quedo aquí, como antes, como siempre; solo, solo, en el mar de mis soledades...". Esto es tuyo y ahora más nuestro que nunca. Pocas personas confiaron en mis letras tanto como tú. Y aquí estoy. Escribiéndote. Sólo a ti. Como hiciste tú en julio de 1991 cuando me dedicaste tu tesoro de poemas: "Para mi encantadora sobrina María, tan cariñosa conmigo, que tiene un alma dulce y una sonrisa eterna...". Pues ahora cuesta un poco más sonreír poeta. Poeta y torero, que te has ido en el mes de la Maestranza dejándonos un mar de soledades, de recuerdos, de apretones en las manos y de miradas intensas. Como esa que me dedicaste cuando después de muchos años volviste a Jerez para verme de blanco. Desde hace cuatro años tu Mar de Soledades está junto a mi cama y ahora releo nuestras últimas conversaciones como si me las estuvieras leyendo tú. "Te quiero". "Más os quiero yo", me respondiste. Seguiré escribiendo deseando que sigas orgulloso.
Comentar
0 Comentarios
Más comentarios