Ocho años después, la Orden de 23 de julio de 2003, regula algunos aspectos sobre la organización y funcionamiento de estos Equipos de Orientación Educativa Especializados, que atenderán a alumnos con dificultades educativas asociadas a discapacidad motora, sensorial, trastornos generales del desarrollo, trastornos graves de la conducta, así como aquel otro alumnado que la consejería de educación determine.

Entre las funciones descritas por esa orden destacan las siguientes:

Colaboración con el profesorado en la detección y atención temprana a las necesidades educativas especiales, determinación de las necesidades, tipo de escolarización y adaptación de recursos.

Asesoramiento al profesorado y a los padres y madres o representante legal del alumno en lo relativo a las técnicas, métodos y recursos apropiados para la acción educativa, tanto en el ámbito escolar como en el familiar.

Contribuir a la formación especializada del profesorado y de los profesionales de los Equipos y Departamentos de Orientación, en el ámbito de las necesidades educativas especiales que son objeto de su ámbito de aplicación. Participación en acciones formativas, elaboración de documentos divulgativos, realización de talleres de adaptación y elaboración de materiales.

Seleccionar, analizar o elaborar materiales didácticos y fomentar el uso de las tecnologías de la información adaptadas para alumnos con necesidades educativas especiales, gestión de bases de datos sobre los alumnos con estas necesidades y de bases de datos de los materiales disponibles...

Obviamente con todas estas tareas deben tener unos criterios de priorización del trabajo, que son, según recoge la mencionada orden, el grado de necesidad del alumno, el nivel de escolarización, siendo prioritario su escolarización en educación infantil y en último lugar, el momento de recepción de la demanda que realiza el centro escolar.

Por todo ello y considerando la importancia y beneficios de una intervención temprana resulta de suma importancia, ante la presencia de dificultades en el alumno hacer una demanda de valoración lo más específica posible que facilite la tarea de estos equipos, así como al principio del curso académico de ser las dificultades del alumno patentes.