CATAVINO DE PAPEL

Manuel Ríos Ruiz

De libros y bibliotecas

LA Feria del Libro jerezana estará abierta hasta el día seis del mes que viene. Y ya nos dejó dicho Cervantes, poniéndolo en boca de una de sus personajes: "No hay libro malo que no tenga algo bueno". El libro es la memoria del mundo y, por lo tanto, del hombre, en todas las épocas. Una realidad que se nos confirma al visitar, una vez más en nuestra vida, la catedral española del libro, la Biblioteca Nacional, sometida estos días tras unos robos recientes, a un inventario, faena inspectora que no se hacía desde mil novecientos ochenta y ocho. Debe ser un trabajo arduo y meticuloso, porque alberga la friolera de diecisiete millones de documentos, empezando por carteles y terminando por videos, pasando por dibujos, ex-libris, fondo especial de mapas, fondo general, fotografías, grabaciones sonoras, grabados, incunables, primeros libros impresos en el siglo XV, manuscritos y archivos personales, mapas, música, prensa y revistas, cartografía, etcétera.

Y toda esta riqueza bibliográfica se aumenta en este país, con el contenido de la Real Biblioteca, la del Palacio de Oriente, fundada por Felipe V, en mil setecientos catorce. El actual carácter de esta biblioteca es eminentemente científico, con manuscritos tan significativos como la mejor copia de "Libro de Buen Amor" y las "Crónicas Generales" de Alfonso X El Sabio.

En un recorrido que se desee hacer por las grandes bibliotecas madrileñas, no puede faltar la Biblioteca Municipal, en la que existe una valiosa colección paremiológica, continuamente visitada por los estudiosos del refranero. También hay que conocer, entre otras, la Biblioteca del Museo Arqueológico, con códices tan importantes como la "Biblia de Huesca· y el "Martirologio y Regla de san Benito".

Venimos hoy a reseñar estas biblioteca capitalinas, porque con motivo de la Feria del Libro de Jerez, debemos sentirnos orgullosos de nuestra histórica Biblioteca Municipal y de su red de biblioteca de barrios, comparable a las más ricas de la autonomía andaluza. Y en las que venimos depositando desde hace algunos años libros y revistas, en un afán de colaborar con su riqueza bibliográfica. Las bibliotecas, pese a los adelantos informáticos en auge en torno a la información cultural, prosiguen siendo el lugar donde el libro nos espera desde siglos, para brindarnos su mensaje histórico, artístico y literario. Se ha escrito que el buen lector hace el buen libro. Seamos buenos lectores, para que los buenos libros cumplan su destino. Y recodemos una frase célebre por clarividentes y original. Es de Hosmin: "De todas las artes plásticas, la más plástica es la lectura".

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