Cuarto de Muestras

Estoy malita

Es más fácil aceptar una bajaque una deserción

Si ya no puedes ir a ninguna comilona más porque corres el peligro de explotar al segundo canapé que te sirvan y estás exhausto de tomar exquisiteces, te recomiendo un truco: invéntate una pequeña enfermedad incordiosa de esas que no matan, pero todo el mundo respeta. Ya, ya sé que con la salud no se juega, aunque por salud podemos recurrir precisamente a esta mentirijilla piadosa. Llega tu promoción del colegio o de la facultad, tus compañeros de profesión, tu pandilla de juventud o esos amigos que ves de año en año y, si no quieres tragarte otro menú concertado y que tu bolsillo pierda el poco dinero que le queda a estas alturas, sólo tienes una solución: ponerte malito. Me ha vuelto a dar un ataque de gota, acabo de tener una gastroenteritis que me ha dejado exhausta o me acaban de descubrir una intolerancia al huevo y a los lácteos que no me permite comer apenas nada, por poner algunos ejemplos sencillos y nada imaginativos. Quién lo diría, resulta mucho más convincente un achaque cualquiera que el sincero "no puedo más". Es más fácil aceptar una baja que una deserción. Nuestro intransigente ánimo festero es así de orgulloso.

La gente respeta más la salud que la voluntad y por eso si te limitas a decir que no tienes ganas no te lo van a aceptar y vas a quedar como alguien grosero y sin corazón. Nada, nada, di que la gota te tiene en un ay que no te deja moverte. La misma persona que te invita al exceso te lo reprochará y te dirá que son días de abusos que pasan factura.

Es verdad que al escribir este tipo de artículos corro el peligro de perder mi credibilidad para siempre y que, si de verdad me pongo mala, nadie me crea. Muchos dirán, ya se está inventando eso de la gastroenteritis, déjate de historias y vente a comer; cómo si a mí hubiera que empujarme para divertirme. A partir de ahora intentaré argumentar mis excusas con certificado médico y chuparé el suelo como cuando era chica para coger unas décimas de fiebre y que se me crea.

Aun así, me compensa contar el truco porque he resuelto el artículo de hoy. No voy a demostraros empíricamente el invento porque supondría delatar a personas que quiero mucho. Baste decir que este método está avalado por grandes disfrutones y científicamente probado que funciona a partir del jueves de Feria de Jerez, a mediados de agosto y hasta un viernes cualquiera si lo que nos apetece es quedarnos en casa leyendo. Se ruega discreción.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios