La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal que presuntamente defraudó 1,5 millones de euros a importantes compañías de seguros afincadas sobre todo en Cataluña. En la operación, que se ha llevado a cabo en tres fases y que ha tenido una duración de dos años, se ha detenido a 144 personas y tomado declaración a muchas más para esclarecer unos hechos que se remontan en el tiempo durante varios años, de ahí la dificultad de encontrar a todos los implicados.

Según ha podido saber este diario, el principal cabecilla de la trama es un corredor de seguros de El Puerto de Santa María que operaba por toda la provincia, aunque las poblaciones donde se han sumado más partes de daños personales falsos son Jerez, La Línea de la Concepción, El Puerto de Santa María y la capital.

Las aseguradoras, con sede en Barcelona, denunciaron ante la Policía las irregularidades

Los siniestros que la Unidad de Delitos Económicos de la Udyco Bahía de Cádiz, que es quien se hizo cargo de la investigación, considera como falsos son 330, pero no se descarta que haya más.

El modus operandi de la trama consistía en rellenar partes falsos de accidentes en los que, por ejemplo, se aumentaba el número de ocupantes del vehículo siniestrado. Esto hacía que un simple alcance trasero le costara a las compañías hasta 20.000 euros por las diversas reclamaciones de esguinces cervicales de personas que ni siquiera iban a bordo del vehículo.

La investigación arrancó en la Jefatura de la Policía Nacional de Barcelona, después de que varias importantes compañías de seguro con sede en la Ciudad Condal presentaran una denuncia relatando esta práctica fraudulenta. Las aseguradoras llegaron a contratar investigadores privados -algo muy habitual en este sector- para seguir a los supuestos afectados, y, tras comprobar que todo se trataba de un teatrillo para conseguir suculentas indemnizaciones decidieron aportar las pruebas recabadas a la Policía Nacional.

Desde Barcelona se dio traslado a la unidad antes mencionada de la Comisaría Provincial de Cádiz, que tras dos años de duro trabajo, en el que los agentes han tenido que indagar uno por uno los partes más sospechosos, se ha podido concretar en 144 los detenidos. Todos ellos están en libertad con cargos actualmente tras prestar declaración y la Policía considera que el cabecilla de la trama es un conocido agente de seguros de El Puerto de Santa María, que sería el que habría ido aleccionado al resto de implicados para alcanzar la bonita suma defraudada a las compañías falseando los partes de manera sistemática, hasta el punto de hacerlas sospechar por el alto nivel de siniestralidad que arroja la provincia en este tipo de sucesos y que la sitúan a la cabeza de las estadísticas nacionales.

La estafa masiva a las compañías de seguros ha obligado a la Policía Nacional a investigar a clínicas, empresas de rehabilitación y médicos, para comprobar su grado de implicación en un asunto que olía mal desde el inicio. De momento parece que no hay ningún profesional de la sanidad imputado en el caso.

La investigación ha durado tanto tiempo porque la Policía ha tenido que remontarse atrás varios años, de hecho, se calcula que este fraude podría haberse iniciado hace más de cuatro años. La tediosa labor de ir cotejando parte por parte, médico por médico, hospital por hospital, ha supuesto un esfuerzo titánico que la Policía ve ahora recompensado con la desmantelación de esta organización y la detención de estas 144 personas, una cifra muy llamativa, sobre todo teniendo en cuenta que todos ellos son de la provincia gaditana.

Las lesiones personales son muy costosas para las compañías, ya que al coste de las bajas laborales se une el precio de las sesiones de rehabilitación. En total, por un esguince cervical sin complicaciones, las compañías pueden tener que abonar una media de 4.000 euros.

El subdelegado del Gobierno en Cádiz, Agustín Muñoz, en compañía del comisario provincial, Antonio Ramírez, y responsables de la investigación, darán hoy más detalles en una rueda de prensa.