Julio de 2008. El alcalde, Manuel de Bernardo, en declaraciones realizadas a este periódico anunciaba que la Fundación Camarón se asentaría sobre la parcela colindante a la Venta de Vargas que hasta hace pocas semanas ocupaban los servicios eléctricos municipales. Al mismo tiempo, el regidor reconocía que los trámites estaban resultando bastante menos ágiles de lo que se creía inicialmente. Habrá que esperar, decía.

Luego, silencio. Durante casi tres años, las declaraciones realizadas en ocasiones puntuales por el Gobierno municipal en torno a la Fundación Camarón se limitaban a afirmar que se mantenían contactos entre varias instituciones y administraciones y que se estaba trabajando en el asunto. Punto y final.

Hasta la semana pasada, cuando el PA -tras las propuestas electorales en torno a la Fundación realizadas primero por el PP y luego por el PSOE- decidió romper con su sigilo y discreción para anunciar el inminente derribo de la nave de los servicios eléctricos, que se llevará a cabo en cuestión de días.

Fue una reacción de De Bernardo a las críticas lanzadas días antes por el candidato popular, José Loaiza, en torno a la demora del equipo de gobierno por abrir la Fundación Camarón y el firme compromiso adquirido por el PP para dar prioridad a esta actuación si gana las elecciones municipales. Y, sobre todo, una reacción a la propuesta electoral socialista, que después de apostar por ubicar dicha Fundación en la Casa Lazaga y luego en el Museo Histórico Municipal, planteaba su sede justo en el mismo lugar escogido hace años por los andalucistas: en la parcela ocupada por los servicios eléctricos, junto a la Venta de Vargas. La misma nave que acaba de ser desalojada tras el traslado del servicio a las instalaciones del polígono de Puente de Hierro y que, en breve, una vez desafectada como servicio público, será demolida para levantar sobre el solar el edificio que acogerá la Casa Museo de Camarón.

Por eso, desde las filas andalucistas no se dudó en recriminar al PSOE y su portavoz, Fernando López Gil, su oportunismo para reconducir su propuesta de flamenco y de la sede de la Fundación Camarón en función del trabajo desarrollado durante los últimos años por el Gobierno andalucista. Eso sí, en absoluto silencio y sin que las gestiones trascendieran a la opinión pública.

Oficialmente, el alcalde -con el expediente administrativo de la finca en una mano y el proyecto de la Fundación Casa Museo en la otra- mostró su "alegría" ante la "evolución" del PSOE: "Ya podemos decir que existe unanimidad en los partidos políticos de la ciudad en cuanto al espacio para la sede de la Fundación Camarón", apuntó. Su declaración llevaba implícita también la alusión al PP, formación con la que ha gobernado durante tres años y con la que ha gestionado buena parte del proyecto al estar al frente de Cultura y de Urbanismo.

"Nosotros teníamos esta idea y hemos venido trabajando en ella mientras escuchábamos proyectos alternativos para la Fundación Casa Museo Camarón por parte del PSOE, que proponía la Casa Lazaga, el Museo... Ahora se ha sumado a esta iniciativa y me alegro de que estemos de acuerdo porque es un proyecto que no tiene marcha atrás y que tiene que ser santo y seña de la ciudad", dijo De Bernardo, que igualmente reconoció la lentitud del proceso.

La antigua nave será ahora demolida, si bien la construcción de la Casa Museo tendrá que esperar a que se resuelva su financiación, en la que también trabaja el Ayuntamiento. El regidor aludió incluso a la polémica reubicación de la estatua del mítico cantaor en el entorno de la Venta de Vargas, no del todo entendida actualmente, ya que se ha hecho teniendo en cuenta la futura apertura de la Casa Museo. "La escultura estará mirando hacia la puerta de dicha Casa Museo, así se lo hemos explicado también a la familia de José Monge, que estaba también preocupada por el tema", explicó el alcalde.