Provincia de Cádiz

La ocupación hotelera ya está en el 50% sin el tirón del verano

  • El sector mantiene 43.600 plazas activas en otoño, 4.000 más que hace dos temporadas

El último observatorio provincial sobre ocupación hotelera que publica mensualmente el Insituto Nacional de Estadísitca y que analiza octubre, el primer mes fuera de la temporada alta veraniega de sol y playa, arroja un dato significativo: los 416 establecimientos hoteleros de la provincia que decidieron mantener sus puertas abiertas durante este mes (en temporada alta son 507 los establecimientos hoteleros registrados) alcanzaron de media una ocupación del 52%. Es una recuperación significativa tras años de baches postveraniegos con ocupaciones que tocaron su suelo en el año 2012, cuando eran 408 los negocios que competían en esa franja, pero que no lograron ni el 40% de ocupación. Estas bajas ocupaciones hicieron a muchos negocios del sector desistir, alpunto que en octubre de 2014, uno de los peores años para el turismo de fuera de temporada de la provincia, sólo se mantuvieron abiertos después del verano 368 hoteles con 41.900 plazas.

El pasado octubre ya estaban activas 43.600 plazas, muy lejos aún de las 46.330 plazas que había en el año 2010, obteniendo un 54% de ocupación, prueba de que aún nos encontramos en trance de recuperación tras el gran batacazo de la crisis.

Estos datos situados en octubre son sólo un síntoma de la salud del turismo más allá del atractivo playero, ya que las cifras veraniegas tienen una mayor estabilidad y se dan por descontadas, pero es el resto del año cuando el turismo tiene que marcar su músculo con propuestas alternativas.

La provincia tiene en total 48.000 plazas hoteleras, lo que quiere decir que se renuncia fuera de temporada a unas 4.500 plazas. El momento más bajo del año es enero, cuando la mayor parte de los hoteles toman sus vacaciones y sólo se mantienen activas 21.000 plazas, de las cuales sólo se ocupan un 23%. Esto no causa de momento mayor preocupación. Si algo no es la provincia, es un destino invernal, pero sí que al sector le interesa el otoño y la primavera y es en ese sentido cuando el comportamiento de este 2016 está dando datos para la esperanza. Mayo, por ejemplo, ya rozó el 50%, lo que casi es el umbral de la rentabilidad, pero aún marzo y abril siguen flojos, por debajo del 40%.

Para el empleo esto se traduce en que tener todo el sector hotelero a pleno rendimiento necesita una mano de obra de 8.127 trabajadores. En la temporada media (mayo, octubre...) se pierde buena parte de este empleo y sólo se cuenta con 6.200 trabajadores. Sin embargo, lo que es empleo fijo del sector, no de temporada, sino de todo el año, se sitúa en 2.200 trabajadores. Esa es la plantilla estable de nuestro parque hotelero.

Estos datos de 2016 suponen un incremento del empleo, ya que el pasado octubre se empleó a 500 trabajadores más que en el año 2015 y mil más que en 2014 ese mismo mes. Aún no se ha recuperado todo el empleo de 2010, cuando trabajaban en los hoteles en otoño más de 7.000 personas, pero la línea vuelve a ser ascendente. El techo de empleo en los hoteles de la provincia se alcanzó en agosto de 2007: 10.817 nóminas se firmaron aquel mes. Esa cifra marca el empleo destruido en todo este tiempo.

En la comparación con dos provincias con las que se compite, Málaga en sol y playa y Sevilla en oferta alternativa, se observa que la provincia aún está muy lejos de Málaga. Y Sevilla se está aproximando. En agosto Málaga tiene 646 establecimientos a pleno rendimiento con cerca de cien mil plazas, si bien la ocupación es sólo sensiblemente inferior (cuatro puntos, 85% de Cádiz frente a 81% de Málaga). Donde más se nota la diferencia es en el empleo creado. Málaga, con más de 16.000 trabajadores de hoteles en la temporada alta, dobla a la provincia.

Por su parte, a Sevilla conviene mirarla con los datos de octubre, mes en el que no hay eventos especialmente significativos ni en una ni en otra provincia. En este sentido Sevilla ha registrado un notable incremento durante los últimos años y ya cuenta con 380 negocios hoteleros, veinte más de los que tiene abiertos durante agosto. Teniendo menos hoteles en otoño y muchas menos plazas (no llega a 30.000), ocupa casi a las mismas personas que la provincia de Cádiz, 6.210, y dos mil trabajadores más del empleo que genera nuestra provincia ese mes. Estos datos tienen su sentido en que la ocupación es mucho más alta en Sevilla, con un 62%, que en Cádiz. Le supera en diez puntos. En cualquier caso, una y otra provincia, Sevilla y Cádiz, no pueden ni acercarse a la provincia turística por excelencia, donde los touroperadores no paran de traer clientes del exterior. Málaga, en octubre, en otoño, supera a Sevilla y Cádiz en todo: personal, ocupación, número de hoteles y número de plazas.

El secreto está en la captación de turismo extranjero y en eso Málaga en Andalucía es imbatible y los esfuerzos de Cádiz dan sus frutos pero muy poquito a poco. Málaga ha alojado en el pasado mes de octubre en sus hoteles a 356.000 extranjeros, 30.000 más de los que acoge en agosto, que es más de cifras nacionales. Por su parte, Sevilla tuvo 176.000 visitantes extranjeros que pernoctaron en sus hoteles. Cádiz sólo tuvo a 103.000, que en cualquier caso son 25.000 más de los que tuvo en octubre de hace dos años. Además, los visitantes de Málaga pasan más tiempo y esta provincia supera el millón y medio de pernoctaciones, que es un millón más de las que tuvo la provincia en un mes que, como se ha dicho, no cabe calificarlo como malo.

El Observatorio Turístico de Diputación ya tiene detectados los campos en los que crecer. Así se sabe que uno de cada tres visitantes extranjeros de la provincia son alemanes, seguidos a mucha distancia del Reino Unido. Mercados trabajados por Málaga como el francés, el italiano y el ruso todavía tienen mucho margen de crecimiento.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios