Encarando la recta final del mes de agosto y a punto de dejar atrás la temporada alta turística, ya se pueden extraer algunos datos acerca de lo que ha sido el mes de julio para este sector.

Según cifras del Instituto Nacional de Estadística, recogidas por el Patronato Provincial de Turismo, los establecimientos hoteleros repartidos por la provincia han notado un descenso tanto de clientes como de pernoctaciones, reflejando un saldo negativo con respecto al mismo periodo del pasado año.

Se ha empleado a más personal, han abierto más establecimientos y hay más camas

Así, a pesar de que todos los expertos aventuraban un verano con números de récord gracias a la llegada de un mayor porcentaje de turistas, lo cierto es que la realidad demuestra lo contrario.

El pasado mes se alojaron en hoteles de nuestra provincia 327.791 personas, 2.777 menos que en 2016, cuando se alcanzaron los 330.748 huéspedes. Especial relevancia tiene la 'estampida' de viajeros nacionales, ya que 10.570 que eligieron Cádiz en julio de 2016 han optado este año por otro destino. Por el contrario, han aumentado los turistas extranjeros, concretamente han venido 7.793 más que el año anterior.

En cuanto a las pernoctaciones, éstas también han descendido notablemente, registrándose 25.041 menos, ya que se ha pasado de 1.155.473 en julio de 2016 a 1.130.432 en el presente año.

La situación en cuanto a las pernoctaciones es idéntica a la llegada de viajeros, porque han sido inferiores en turistas residentes y superiores en no residentes. Así, en el mismo periodo del año pasado se contabilizaron 774.670 pernoctaciones de huéspedes nacionales por las 705.608 de esta ocasión, lo que supone 69.062 menos. En cambio, las pernoctaciones de los turistas internacionales crecieron en 44.021.

Otros datos que recoge el Instituto Nacional de Estadística son la estancia media, que ha descendido levemente, de 3,49 días a 3,45, y el grado de ocupación, que claramente iba a ser negativo con respecto al año pasado, bajando del 76,26% al 73,58%, un 2,68% menos.

Todo esto a pesar de que las plazas ofertadas han aumentado, puesto que el número de camas disponibles ha pasado de las 42.273 de 2016 a las 48.240 de este 2017, o sea, 967 más, y de que ha abierto un mayor número de hoteles, concretamente 26 más que en el ejercicio anterior. Si el año pasado estaban disponibles 495 alojamientos, en esta ocasión había 521.

Por último, el mes de julio sí ha dejado un dato claramente positivo y es la cifra de personas empleadas durante este periodo en estos establecimientos. En julio de 2016 trabajaron 7.790 personas, mientras que en este 2017 lo han hecho 8.181, 391 más.

En cuanto al acumulado, de enero a julio han optado por hospedarse en nuestra provincia 1.436.792 personas, lo que ha supuesto 4.124.594 pernotaciones en lo que llevamos de año.