Concluyó la Semana Santa y lo hizo con el récord negativo de jornadas pasadas por agua. Habría que remontarse muchos años atrás, muchas décadas, para encontrar una semana tan perjudicada en lo climatológico como esta. Es más, quizás no existan precedentes, porque en esta Semana Santa han sido más las hermandades que no han podido realizar sus estaciones de penitencia hasta la Catedral, 18, que las que sí las han podido hacer,17.

Si el Domingo de Ramos fue la única jornada en la que no hubo riesgo de lluvia, el fuerte viento fue el triste protagonista, lo que provocó que, una vez caída la noche, se vieran desoladoras estampas de candelerías apagadas. El viento, que también estuvo presente el lunes, hizo fuerza en el manto de la Virgen de Las Angustias y esto provocó que se rompiera una espiga de su hombro izquierdo, lo que llevó a la hermandad a recogerse tomando un camino más corto de camino a su capilla.

A partir del Martes, y con el paréntesis del Miércoles Santo -un día casi perfecto en cuanto al tiempo- la lluvia fue la triste protagonista. Clemencia, Defensión, Amor, Desconsuelo, Redención, Vera Cruz, Lanzada, Oración en el Huerto, Mayor Dolor, Santo Crucifijo, Cinco Llagas, Nazareno, Buena Muerte, Yedra, Exaltación, Loreto, Soledad y Santo Entierro se quedaron sin poder hacer estación de penitencia. Las cuatro del Martes Santo y las cinco de la Madrugada ni lo intentaron. Redención, Lanzada y Oración en el Huerto se mojaron el Jueves Santo, y el Viernes, sólo El Cristo se aventuró a salir a la calle. Afortunadamente, la tarde y la noche se escaparon sin llover.

Para José Luis Sánchez López, portavoz del Consejo Local de Hermandades y Cofradías de Jerez, la Semana Santa de este año ha sido "agridulce" debido al mal tiempo, destacando que "empezó muy bien con el Sábado de Pasión y el Domingo de Ramos, pero el martes ya se empezó a estropear", señalando que no recuerda una Semana Santa tan mala como esta en ese aspecto. Sánchez López se queda "con la ilusión que han demostrado los cofrades a pesar de las adversidades".

Javier Lucena, hermano mayor de la Coronación considera que esta Semana Santa "nos ha hecho reflexionar mucho y nos ha hecho ver esta semana de otra manera viendo la entereza de las juntas de gobierno y los nazarenos. En ese sentido, hemos mostrado una gran madurez".

Por su parte, Daniel Gil, hermano mayor de la hermandad del Soberano Poder, de las pocas que se han salvado de la lluvia, definió como "muy corta en cuanto a procesiones se refiere" la Semana Santa de 2011. Con lo que se queda, Gil destaca "la estación de penitencia de mi hermandad", con la que se estrenaba este año como hermano mayor y "con el Miércoles Santo en general", así como "con la hermandad de la Paz el Lunes Santo, aunque el viento deslució un poco el palio del Refugio".

Y de dos hermanos mayores que sí pudieron procesionar con sus hermandades a otro que se lo impidió el mal tiempo. Ildefonso Roldán, de la Yedra, afirma que su hermandad lo tenía claro "desde el medio día del Jueves Santo, porque sabíamos que el tiempo empeoraría". Así, se queda con tres momentos esta Semana Santa. De un lado, "con el cortejo de Las Angustias", de otro "el que viví representando a mi hermandad en una presidencia el Miércoles Santo con las Tres Caídas", pero "sobre todo me quedo con la gran cantidad de devotos que se acercaron hasta la capilla de La Yedra hasta las 7 de la mañana del Viernes Santo para ver al Señor de la Sentencia y a la Esperanza".

Habrá que esperar hasta 2012 para ver algunos de los estrenos que presentaban las hermandades que no han podido procesionar este año, como las caídas trasera y laterales del palio de la O y las dalmáticas de su cuerpo de acólitos; el dorado del paso del Cristo del Amor o el detalle de ver con potencias y corona de espinas al Santísimo Cristo de la Exaltación, entre otros.