Tiempos de cuaresma

Una Semana Santa sin lluvias pero con fresco

  • Los patrones meteorológicos marcan la entrada de un anticiclón que se situará en el Atlántico, descartando las precipitaciones

Se trata posiblemente del artículo más complicado al que tiene que hacer frente esta redacción cofrade que desde el pasado catorce de febrero, Miércoles de Ceniza, ha venido publicando una doble página informativa y todo cuanto acontece en el mundo de las hermandades y cofradías de cara a la ya inminente Semana Santa.

Artículo complicado porque hay que irse a los medios, por usar un símil taurino, y abrochar en la boca de riego con cierta valentía. Es decir, arriesgarse y decir lo que podrá ocurrir en lo meteorológico. A la espera de que el 'golfo' no deje esta nota a la altura del betún.

La incidencia de un anticiclón que viene de las Islas Canarias propiciará buen tiempo

En cualquiera de los casos, tras haber consultado distintas fuentes dentro del ámbito de la meteorología, parece haber consenso en que la Semana Santa de 2018 no se presenta muy complicada en cuanto al tiempo. La entrada de un anticiclón que viene desde la zona de las Islas Canarias darán al traste al aluvión de ciclogénesis explosivas que toda la Península ha venido recibiendo desde hace ya alrededor de tres semanas.

Este anticiclón, según afirman estas fuentes solventes, va a estabilizarse en la zona atlántica con total seguridad. Propiciará buen tiempo en los días previos a la Semana Santa y garantizará una situación estable en los días de la Semana Mayor.

En cualquiera de los casos, la incidencia de este fenómeno que eliminará los peligros de chubascos, no tendrá la solidez del otro gran anticiclón que marca el eje meteorológico de la zona como es el de las Azores. En este sentido, habría que apuntar que la entrada del que se espera que entre hoy mismo ofrecerá cielos con intervalos nubosos. También, apuntar que podrá haber jornadas con el protagonismo puesto en el viento que tendrá un componente variable sur, oeste incluso de levante.

Las jornadas serán ciertamente frescas. Las previsiones en este sentido hacen presagiar días con máximas de 19 o 20 grados mientras que las mínimas podrán estar entre los 8 o 10 grados.

Por tanto, comentar que la Semana Santa que se acerca será, como marca la primavera, con cierta inestabilidad pero dentro de un anticiclón que llevará su propio desarrollo pero que impedirá la aparición de las lluvias. Cielos con nubes y noches de rebeca. Será, parafraseando a un castizo, una Semana Santa más de vino que de cerveza por no sufrir mucho calor.

Ciertamente, tras tantas semanas de lluvias abundantes, vientos, ciclones y tiempo de perros, estar ante un escenario tan positivo propicia que los cofrades están más atentos al montaje de las candelerías que de las múltiples predicciones que ofrecen las aplicaciones de los teléfonos móviles.

Después vendrán los días y la realidad de cada día. Ojalá que esta nota sea el presagio de una Semana Santa con buen tiempo de pitón a rabo, por rematar con otra expresión taurina.

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