Tres trabajadores de un kebab de Pamplona fueron detenidos como presuntos autores de un delito contra la salud pública y otro de lesiones por intoxicación de comida con raticida. La investigación se inició tras ingresar en el hospital una joven que presentaba en la sangre "una extraña alteración en la coagulación" de la que la "única causa posible" era la ingestión de un producto raticida.

Las pesquisas llevaron a un establecimiento de comida de la capital navarra donde la víctima y su pareja encargaron la cena días atrás, notando un "extraño sabor" que achacaron a algún cambio en las salsas. En el registro se encontraron distintas cantidades de un raticida "altamente tóxico, que impregnaba incluso la encimera donde los empleados manipulaban la comida antes de servirla".