El magistrado-presidente del Tribunal del Jurado condenó al acusado de haber matado al amante de su mujer en un bar de Porto Cristo (Mallorca), en 2014, a una pena de 20 años y seis meses de prisión y a pagar una indemnización de 250.000 euros a la mujer e hija del fallecido. En la sentencia, se lo considera autor de un delito de asesinato alevoso, por lo que lo condenan a 18 años y seis meses de cárcel, y de otro delito de tenencia ilícita de armas cortas -ya que no tenía licencia para éstas- por el que fue castigado a dos años de prisión.

El pasado 19 de octubre, el Tribunal del Jurado emitió un veredicto de culpabilidad contra el acusado por considerar probado que acudió a un bar regentado por la víctima, que al parecer mantenía una relación sentimental con la esposa del acusado, y ahí le disparó dos tiros con un revólver causándole la muerte.

El procesado negó los hechos y aseguró que alguien le había tendido "una trampa", rechazando el posible móvil pasional del crimen, ya que, según dijo, no conocía la relación de su ex mujer con la víctima. También indicó que en el momento de los hechos ya mantenían una vida separada.