Emilio Huertas. Novillero

"La Maestranza es un escaparate de lujo para darme a conocer"

  • El diestro manchego, ganador del Escapulario de Oro de Lima y de la Feria de Algemesí, ha ocupado el quinto puesto de su escalafón y aspira a debutar en la plaza de Sevilla

El novillero manchego Emilio Huertas (Santa Cruz de Mudela, 1989) y el matador de toros sevillano Tomás Campuzano han sellado en Sevilla un acuerdo de apoderamiento, con el tradicional apretón de manos y tiempo indefinido. El joven diestro, que el año pasado cosechó triunfos en varias plazas de primer orden, como Madrid, señala que está muy ilusionado con este apoderamiento en el que tendrá como referente "a un torero que significa mucho para mí. Tomás Campuzano es un torero que puede aportarme muchas cosas técnicamente, personalmente y que, en definitiva, me puede hacer crecer profesionalmente. Aunque por la diferencia de edad no lo he visto torear, tengo la imagen de una excelente persona".

Emilio Huertas, que se trasladará de Ciudad Real a la localidad sevillana de Sanlúcar la Mayor para prepararse a las órdenes de Tomás Campuzano, afirma que su sueño como torero "comenzó siendo un niño, aunque en mi familia nunca hubo nadie que se dedicara a ello. Mis primeros pasos los di en la Escuela de Tauromaquia de Madrid, donde entre 2006 y 2008 tuve como profesor a Macareno. Luego, en 2008 y 2009 toreé varias novilladas sin picadores y el año pasado debuté con caballos, en Velayos, Ávila, el 31 de enero".

En la pasada temporada, en la que ocupó el quinto puesto del escalafón novilleril, Huertas sumó 27 novilladas, en las que cortó 45 orejas y dos rabos. Una campaña de la que destaca que "di a conocer mi proyección. De todos los triunfos, para mí el más significativo fue el que conseguí en la plaza de toros de Acho, de Lima, donde el 12 de septiembre conseguí el Escapulario de Oro de la Virgen del Rosario. Y, por supuesto, también el alzarme como triunfador del ciclo de novilladas de Algemesí". Aunque también ganó otros trofeos, el novillero afirma que se queda, como faenas más logradas, con las que realizó "en Tudela de Duero a un novillo de Urcola y la de Algemesí". Dos trasteos en los que se aproximó a su faena soñada, que consiste "en llevar los toros muy largos y en sentirme mucho. Lo que busco es un toreo clásico y elegante a la vez". Entre sus referentes, el novillero señala dos toreros con dos tauromaquias muy distintas y ricas, "Finito de Córdoba y José Tomás, dos estilos diferentes, que me aportan muchas cosas".

De cara a 2011, señala que lo fundamental "será actuar en Sevilla y Madrid. Estoy deseando debutar en la Maestranza. Es un escaparate de lujo para darme a conocer en Andalucía. El público de la Maestranza valora mucho la estética y la ligazón. Saben verlo todo muy bien y aunque parezca menos duro que el de Madrid, también es muy exigente, porque conocen todos los registros del toreo. En cuanto a Madrid, entré el año pasado en una sustitución -el 28 de agosto dentro del ciclo Ocho Naciones, dando una vuelta al ruedo- y la sensación fue bastante buena. Toreé en una novillada dura de El Retamar y la gente estuvo conmigo".

El torero manchego afirma que durante 2011, "intentaré torear lo máximo posible. Aunque lo que más me preocupa ahora es hacer campo y mejorar de cara la alternativa, en la que todavía no pienso".

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