El matador de toros Pepín Liria (Cehegín, 1970) retornará el próximo 10 de marzo en Illescas, alternando con El Juli y Manzanares, con toros de José Vázquez en un cartel que se presentó ayer y en una temporada en la que cumple 25 años de alternativa y será apoderado por Ángel Bernal. La idea surgió el año pasado en Pamplona y su amigo Espartaco, en cuya finca está encerrado desde hace medio mes en una intensa preparación, le ha alentado para que toree algunas corridas más.

-Pepín, ¿por qué la reaparición?

-Porque se conmemoran 25 años de mi alternativa y por las pérdidas en los dos últimos años de Víctor Barrio e Iván Fandiño a los que quiero rendir homenaje por haber hecho más grande mi profesión y a mí. Por eso, mi reaparición, como el toreo, es sentimental y no tiene que ver nada con razones materiales.

"De Sevilla tengo un emocionante recuerdo de mi última actuación que no se debe tocar. Aquella tarde fue épica"

-¿Cómo eran Barrio y Fandiño?

-No los traté mucho, pero sí supe de su carrera. Fueron toreros grandiosos. Víctor no pudo disfrutar de la grandeza de la profesión. Iván, afortunadamente, tuvo la suerte de sentirse triunfador.

-¿Toreará en Sevilla?

-No. Tengo un emocionante recuerdo de mi última actuación en La Maestranza -3 de abril de 2008-. Hay historias que no se deben tocar. Aquella tarde fue épica. Todo el mundo me recuerda aquella faena a un toro de Victorino que me cogió dos veces, una de ellas a portagayola. El público solicitó las dos orejas y me concedieron una. Di una de las vueltas al ruedo más clamorosas de mi carrera. Sucedió lo que hubiera firmado antes de lo que pasó en el ruedo. No quiero cambiar ese recuerdo ni la emoción que sentí. Tenía que devolver a Sevilla lo que me había dado. Hubo años en que no toreaba ni en Castellón ni en Valencia y comenzaba la temporada en Sevilla. Corté una veintena de orejas en esta plaza. Hasta viví aquí.

"Torearé cinco o seis corridas: Illescas, Murcia, quizás Pamplona... Jamás haré una temporada completa"

-La idea de su vuelta surgió en Pamplona. ¿Volverá a esa plaza?

-El año pasado, cuando hablé con la Casa de Misericordia, saltó la chispa para decidirme a esta vuelta. Creo que los toreros deben aparecer en esa feria; aunque todavía es pronto y hay que ver las cosas.

-¿Cuántas corridas toreará?

-Cinco o seis como mucho. Illescas, Murcia, quizás Pamplona...

-¿Y ahí sería con una corrida dura, como con las que triunfó tantas tardes?

-Para eso no estoy. El año pasado me operaron de tres o cuatro trombos, de un pie, tengo problemas de cervicales... El cuerpo tiene memoria para lo bueno y para lo malo.

"Me estoy preparando de manera especial. Llevo medio mes encerrado en la finca de Espartaco"

-El 11 de septiembre se cumplen 25 años de su alternativa en Murcia. ¿Qué recuerdos le vienen de aquel día?

-Pensé que sería el final de mi carrera. Mi sueño era ser matador de toros y se cumplía. Además en mi tierra. Recuerdo la ilusión por el estreno del vestido blanco y oro. Nunca esperé que la vida me iba a regalar tantos años en mi profesión.

-Tras la retirada en 2008, ¿pensó en algún momento en que reaparecería?

-Siempre dije que volvería a torear si lo necesitaba mi tierra, como hice en el festival por el terremoto de Lorca, o por alguna otra causa benéfica. No me he salido del guión. Las razones de mi retorno este año son por el aniversario y por esos dos grandes toreros, dos compañeros que murieron en el ruedo. Yo sigo pensando lo mismo: jamás haré una temporada completa.

-Ya, pero imagine que todo sale perfecto. ¿No lo pensaría?

-No. No me hace falta nada por conseguir. Y tampoco tengo que ocupar un puesto que merece un chaval que empieza.

"Tengo el mismo tipo que cuando me marché. Me he podido poner el traje de torear sin problema alguno"

-¿Cómo definiría su carrera?

-Llegué al final siendo feliz y conseguí más de lo que pensaba. Tuve mucha suerte. Me fui triunfando y con el respeto de los profesionales y la prensa.

-¿Cómo ve el panorama taurino actual?

-Tiene una salud fuera de lo normal. Estoy un poco preocupado por eso. Los toreros hacen cosas increíbles. Y las ganaderías están en muy buen momento.

-¿Y cómo se está preparando?

-Me he cuidado mucho y estoy bien físicamente porque siempre he hecho mucho deporte. Me he podido poner el traje de torear sin problema alguno. Me encaja perfectamente. Tengo el mismo tipo que cuando me marché. No he tenido que perder ni un kilo. Pero, sí, me estoy preparando de manera especial. Llevo medio mes encerrado en la finca de Espartaco, toreando becerras.