El Xerez Deportivo está en cuadro para medirse el domingo al Hércules en el Rico Pérez por culpa de las lesiones y de las sanciones, pero todas no son malas noticias para Esteban Vigo. El técnico malagueño respira un poco más aliviado con la recuperación de José Manuel Rueda, que lleva tres semanas en el dique seco por culpa de una sobrecarga en los isquiotibiales de su pierna derecha, y la de Rafa Barber, ya a punto la grave lesión de ligamentos que le obligó a pasar por quirófano la pasada temporada.

El exmedio del Barça B está listo para reaparecer y eso dará oxígeno a la medular azulina, en la que ni Bruno Herrero, sancionado y aún convaleciente del traumatismo craneal que sufrió ante el Lugo, ni Sidi Keita, castigado con un encuentro.

En principio, los problemas del centrocampista jiennense no parecían demasiado graves pero “se han prolongado más de lo esperado”, aclara Rueda, para resaltar también que “se me han hecho larguísimas estas semanas, la evolución ha ido más lenta de lo que esperábamos. Menos mal que ya todo ha quedado atrás. Ahora, me encuentro bien y listo para lo que el míster necesite. La situación es la que es y todos tenemos que poner de nuestra parte tal y como está el panorama, estamos en cuadro”.

Sobre las numerosas bajas admite precisamente que “estamos un poco tocados pero lo superamos con ilusión. Viajaremos a Alicante con la intención de prolongar nuestra racha, queremos volver con los tres puntos. Ellos se encuentran en una posición muy delicada, no están bien, han tenido que cambiar de entrenador, su gente les apretará desde la grada y debemos sacar tajada de todo eso”.

Aún así, el xerecista admite que “tantas adversidades te dejan un poco tocado, especialmente nos afectaron los problemas de Rafa y de Ruz. Gracias a Dios ya están los dos con nosotros aquí entrenando, están haciendo una minipretemporada y todo ha quedado en un susto pero cuando te lo dicen, el impacto es importante. Lo primero que piensas es que te puede pasar a ti y es muy duro en gente tan joven. Han sido dos golpes importantes, ellos han sido muy fuertes, lo han llevado excepcionalmente y eso también ha sido importante”.

El equipo ha ido mejorando con el paso de las jornadas, lleva cuatro partidos sin perder y Rueda es de los optimistas. “Aunque no quiero hablar demasiado en ese sentido y quiero ser prudente, yo ya comenté al principio de temporada que había que tener un poco de paciencia con el equipo porque había un entrenador nuevo, mucha gente nueva y muy joven y nos iba a llevar un tiempo acoplarnos y asimilar los conceptos. Ahora, el trabajo está dando sus frutos y vamos a más”.

El centrocampista estima también que “hemos ganado confianza y el equipo cada vez tiene más personalidad. Hemos madurado. Aún así, debemos ir con cautela y partido a partido. El calendario inmediato es complicadillo y esta categoría todos sabemos lo complicada que es. Aquí, ganas dos partidos y te colocas en una zona cómoda que los pierdes y te vuelves a complicar”.