Más de dos mil xerecistas forman la 'marea azulina' que se congregará al mediodía en el nuevo Arcángel, que presentará una entrada de gala al juntarse las aficiones del Córdoba y del Deportivo en un derbi andaluz apasionante.

Más de mil ochocientos xerecistas viajan con entradas compradas en la Tienda Oficial -el Deportivo finalmente devolvió ayer sábado la mitad de las 162 localidades de tribuna baja que el Córdoba había enviado el jueves- y otros muchos -en total se calcula que serán más de dos mil- se desplazarán con entrada ya comprada en Córdoba o para pasar por taquilla hoy mismo antes del partido; ayer había bastantes aficionados en El Arcángel para sacar entradas de la zona de Preferencia donde estarán ubicados los seguidores azulinos.

Los once autobuses -cinco aportados por la Diputación Provincial- que desplazarán a medio millar de aficionados partirán de los aparcamientos de Chapín a las siete de la mañana.

Mientras, en Córdoba no se ha generado tanta expectación como en Jerez y prueba de ello es que el viernes sólo habían vendido cinco mil entradas. El club obliga a que los socios pasen por caja, por lo que muchos abonados rezagados (o seguidores que quieran vivir el derbi en primera persona) harán cola para entrar a última hora.

Que el Córdoba juegue en El Arcángel siempre supone la presencia de unas diez mil personas transitando por el albero del recinto ferial. El choque ha sido declarado de alto riesgo por Antiviolencia. Esto implica la presencia de un buen número de efectivos de la Policía Nacional y unas medidas especiales de seguridad: cacheos a la entrada del campo y algunas acotaciones a la hora de aparcar que afectan incluso a los medios acreditados.

Por si todo fuera poco, el partido será emitido a partir de las 12:00 por Canal Plus, con lo que habrá un operativo especial de televisión.

Súmenle a todo este batiburrillo que, como todos los domingos por la mañana, en esa misma explanada se levantará el mercadillo. Todo el que desee llegar al encuentro tendrá que atravesar los puestos.

Además, los recién instalados tornos también ralentizarán el acceso al estadio.