El Xerez DFC se conformó demasiado pronto con un empate que parecía bueno en casa del segundo clasificado pero que se le acabó escapando en el último suspiro. Y es que, tras una primera mitad igualada y con pocas ocasiones, en la segunda los locales tuvieron el balón y multitud de ocasiones, sobre todo en botas de Miki, que al final firmaba el gol del triunfo del Puente Genil. Un gol que obligará a los jerezanos a seguir peleando hasta el final por el soñado ascenso, aunque ahora esté un poco mas complicado.

Salerm Puente Genil y el XDFC protagonizaban el que estaba llamado a ser el partido de la jornada, con los locales buscando asentarse en la segunda posición y los azulinos con las miras puestas en sumar tres puntos de oro que le permitiesen seguir soñando con colarse en la zona noble de la tabla y el ascenso. Pero el miedo a perder de unos y otros marcó el inicio del encuentro, en el que los dos equipos se mostraron algo mas conservadores de lo esperado. Ninguno de los dos conjuntos se atrevía a dar un paso adelante y dejaron pasar los primeros minutos intentando tantear al rival, sin asumir demasiados riesgos ni protagonizar llegadas a la puerta contraria.

Poco a poco, empezaron a llegar algunas jugadas cerca de las áreas, pero lo cierto es que sin demasiado peligro. Locales y visitantes sólo inquietaban en algunas acciones aisladas y jugadas a balón parado, aunque los porteros apenas tuvieron que intervenir. El partido era muy físico y táctico y la igualdad era absoluta, por lo que al descanso se llegaba sin sobresaltos, aún con el cero a cero inicial en el marcador.

Todo iba a tener que resolverse en la segunda mitad y el Salerm Puente Genil se mostró en la reanudación mas valiente que su rival. Los locales optaron por dar un paso al frente y hacerse con el balón, lanzándose en busca de la portería contraria. El XDFC, por su parte, prefería esperar atrás, defendiendo con mucho orden e intentando desbaratar las acciones del contrario.

La presión adelantada de los visitantes generaba muchos problemas en la salida del balón del conjunto local, pero pese a ello el Puente Genil empezaba a llegar cada vez con mas peligro sobre las inmediaciones del área contraria. La entrada de Miki (56') dio además más profundidad al equipo local y el atacante tuvo dos ocasiones claras en los minutos 63 y 66. No acertaba, sin embargo, a batir a un Edu Villegas tremendamente seguro, y los minutos pasaban.

El equipo visitante no parecía tener prisa y seguía esperando una buena ocasión para salir al contragolpe, generando alguna sensación de peligro sólo en jugadas a balón parado. Parecía que el Xerez DFC daba por bueno el empate en un campo muy complicado, sobre todo a medida que el reloj avanzaba y saboreaba ya un buen punto. Pero el Salerm no se conformaba y apretó en la recta final, volcándose por completo en busca de la victoria. Y tanto va le cántaro a la fuente que al final llegó, cuando nadie lo esperaba, en la última jugada del partido. Fue, como no, Miki, que había sido una pesadilla en la segunda mitad y que al final encontró premio a su trabajo con un gol que da alas a los suyos.