Los investigadores siempre han considerado clave el análisis del móvil de Bretón para determinar sus inquietudes los días previos a la desaparición de Ruth y José el 8 de octubre de 2011. El experto en telecomunicaciones Luis Enrique Hellín, cuya declaración ha suscitado mucha polémica en los últimos días tras la denuncia de la familia de Yolanda González -la joven a la que mató en 1980 y por lo que fue condenado a 43 años de prisión-, determinó ayer que el acusado habría borrado hasta 32 llamadas realizadas entre el 30 de septiembre y el 10 de octubre, un periodo clave para reconstruir su vida de aquellos días.

El Cuerpo Nacional de Policía realizó el primer volcado del móvil -un Iphone- el 17 de octubre, el mismo día en que fue detenido. Y, según el experto, el presunto asesino habría realizado el borrado entre el 10 y el 17 de octubre, un periodo de tiempo en que estuvo fuertemente vigilado por los agentes mientras la búsqueda de sus hijos se centraba en la parcela de su familia en Las Quemadillas. De forma paralela al borrado de datos, Bretón habría querido dejar constancia de determinadas llamadas que realizó el mismo día 8, con capturas fotográficas de su comunicación con el 112 la tarde de la desaparición y de los contactos con sus familiares entre las 18:00 y las 18:30. Según la acusación, Bretón habría querido dejar constancia de la simulación de la búsqueda de sus niños.

La llamada a Emergencias 112 se produjo a las 18:39:50 y tuvo una duración de 265 segundos, según la captura que el propio acusado realizó. Las cámaras de la Ciudad de los Niños lo grabaron a las 18:19. A las 18:10, las 18:16, las 18:17, las 18:21, las 18:30 y las 18:31 Bretón contactó con sus hermanos y su cuñado, según las capturas de pantalla que él mismo hizo. Antes de esto, a las 18:05, Bretón mandó un mensaje por Whatsapp a su hermano: "Esto está aborradotado de gente. He tenido que aparcar lejos". "Qué es esto", le replica su familiar. El presunto asesino le responde que se refiere a la Ciudad de los Niños y su hermano le dice que se vaya. "Cualquiera se lo dice a los niños", le replica. "Me refiero a cuando se harten", termina el diálogo Rafael Bretón.

El juez instructor, José Luis Rodríguez Lainz, entregó el Iphone al hermano de Bretón, Rafael -con conocimiento en telecomunicaciones-, el 16 de noviembre de 2011. Y el 13 de junio de 2012 el terminal fue de nuevo requerido para un segundo volcado, en este caso de la memoria íntegra. Hellín distinguió que este segundo análisis fue mucho más intenso debido a que permitió no sólo profundizar en los datos del terminal accesibles para cualquier usuario, sino en la información almacenada en la memoria oculta.

El informe unido a la causa lo redactó finalmente Hellín y determinó que se habrían eliminado 54 llamadas. Este borrado tuvo que hacerlo una persona "con más conocimiento que un simple usuario", ya que debió utilizar un programa especializado desde un equipo informático, determinó Hellín. El experto hizo un chequeo y pudo encontrar varios teléfonos: los del grupo de investigación de la policía; el de la chica con la que Bretón contactó desde Las Quemadillas y un número no identificado.