Andalucía

Cronología de la desaparición

  • Bretón intentó reconciliarse con su mujer el viernes en Huelva antes de recoger a sus hijos del colegio y poner rumbo a Córdoba para pasar el fin de semana

Desde hace 21 días, el Cuerpo Nacional de Policía intenta desvelar qué ocurrió entre las 13:30 -cuando José Bretón recogió a los pequeños Ruth y José en la casa familiar de La Viñuela- y las 18:40, cuando el padre llama a la Comisaría para denunciar la desaparición de los niños. El abogado defensor, José María Sánchez de Puerta, hizo ayer por primera vez una cronología detallada de los pasos que dio su cliente desde el jueves 6 de octubre hasta el momento de la tarde del sábado en que, según su versión, los perdió de vista en el Parque Cruz Conde.

Según este relato, Bretón habría llegado a Huelva el jueves por la noche y se alojó en su vivienda de El Portil. El viernes por la mañana, fue a buscar a los niños a la casa de su exmujer para llevarlos al colegio y, mientras los pequeños estaban en clase, se citó con la madre para tomar un café e intentar una reconciliación. Le regaló un ramo de flores, que ella aceptó, y le dio una carta en la que le pedía retomar la relación, un documento incluido en el sumario judicial. Al final de la jornada escolar, el imputado recoge a los niños y los tres ponen rumbo a Córdoba, donde el imputado residía desde la ruptura.

Aquella noche, los pequeños duermen con los abuelos en la vivienda de la calle Don Carlos Romero, en el barrio de La Viñuela, y él lo hace en la parcela de Las Quemadas. Ya por la mañana, recoge a Ruth y José y los lleva a casa de su tía para que jueguen con sus primos, de edades similares. Los niños almuerzan en casa de su tía, Catalina, en el barrio de San Lorenzo.

13:30 visita a los abuelos en la viñuela

José Bretón recoge a sus hijos y los lleva a la vivienda de La Viñuela para hacer tiempo. Sus padres le preguntan si comerá con ellos, pero Bretón ha planeado almorzar con unos amigos, que finalmente cambian de plan y se van a Montilla. Contrariado, deambula con el coche y los pequeños se quedan dormidos.

13:45 llega a la     parcela de las quemadillas

El detenido decide poner rumbo a la finca de Las Quemadillas, donde la familia suele pasar el fin de semana. Los niños se han quedado dormidos dentro del coche, cada uno en su silla, y Bretón aparca bajo un chamizo con las puertas abiertas.

Mientras los pequeños descansan, él enciende una hoguera para quemar recuerdos de su exmujer, entre ellos algunas prendas de ropa y huesos de animales que la madre habría utilizado en sus prácticas de veterinaria. Esto explicaría, según Sánchez de Puerta, los restos biológicos encontrados por la Policía en la primera inspección en la finca. Vuelve al coche y se queda semidormido hasta que los niños se despiertan.

17:30 sale de la casa para ir al parque cruz conde

Sobre las 18:00, José Bretón llega al Parque Cruz Conde, donde ha quedado con su hermana para que los primos jueguen juntos. Aparca en la calle Pintor Espinosa y camina con los niños de la mano por Pintor Zurbarán y Pintor Losada hasta la zona verde. Durante la reconstrucción el pasado viernes, el juez le preguntó por qué había aparcado tan lejos, y él respondió que no conocía bien la zona y pensaba que ese camino era más directo.

A las 18:08, según detalló el abogado, Bretón le envía un mensaje de texto a su hermana para decirle que ya están en el parque.

18:20 pierde de vista a los pequeños en un despiste

Al llegar a la zona de césped, deja que los niños se separen. Según el letrado, los niños "corretean" y él se sienta a descansar en una máquina para hacer flexiones. En un momento determinado, mira a la derecha, se distrae y al girar de nuevo la vista a la izquierda, donde estaban los niños, ya no los encuentra. "Ahí empieza la agonía", describe el letrado. Son las 18:20.

18:40 primera llamada de alerta a la comisaría

Varios testigos ven a José Bretón buscar a los niños, aunque no existe ningún testimonio que sitúen a Ruth y a José en la zona verde, muy ajetreada cualquier sábado a esa hora. Un testigo joven que declaró en la Comisaría una semana más tarde describe a Bretón con la cara desencajada y una gran preocupación, y las cámaras de seguridad de la Ciudad de lo Niños lo graban preguntándole a un vigilante de seguridad.

En pocos minutos, los hermanos de Bretón se suman a la búsqueda y a las 18:40, ante lo infructuoso de las pesquisas, el padre llama por primera vez al Cuerpo Nacional de Policía.

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