El Gobierno afronta "con calma y sosegado" la negociación que pueda tener con el Reino Unido sobre el futuro de Gibraltar tras el Brexit y con el respaldo que cree que supone la posición fijada por la Comisión Europea. Así lo explicó ayer el portavoz del Gobierno, Íñigo Méndez de Vigo, en la conferencia de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros.

Méndez de Vigo reiteró que la activación del Brexit significa que ahora comienza una fase de negociaciones de dos años a cuyo término "todo el Reino Unido, también sus territorios y sus colonias, saldrán de la Unión Europea". "Por tanto, también Gibraltar saldrá de la UE", recalcó el ministro, que subrayó también que las líneas de negociación previstas por las instituciones europeas recogen la "pura lógica" de que todo lo que concierna a Gibraltar tendrá que ser resuelto por España y el Reino Unido.

A la espera de que comiencen las negociaciones, Méndez de Vigo aseguró que lo que más preocupa al Gobierno de Mariano Rajoy son los derechos de los ciudadanos de uno y otro lado del Peñón y de los del Campo de Gibraltar. Precisamente ayer, el alcalde de La Línea, Juan Franco, sugirió que su ciudad "debe tener una consideración especial en todas las conversaciones derivadas del Brexit". Según el primer edil linense, el municipio merece tener voz "al ser la ciudad más afectada por sus consecuencias".

Franco aludió a la solicitud cursada por cuatro regidores de la Mancomunidad de Municipios del Campo de Gibraltar para la convocatoria de un Consejo de Alcaldes. Suscribió además la propuesta de que el ente comarcal tenga una "voz común" sobre sus intereses en el contexto de necesidades específicas, si bien recalcó que La Línea "debe jugar un papel protagonista".