El escenario económico de 2009 se oscurece. Este año se perderán 120.000 empleos en Andalucía y el producto bruto regional se reducirá un 1,6%. En octubre, la tasa de crecimiento prevista era todavía positiva, del 1%, y se estimaba que irían al paro unas 54.000 personas. Eran pronósticos oficiales, pero la estadística del desempleo crecía imparable. Tres meses después, el panorama es peor. La crisis se ha recrudecido y, siguiendo la estela del Gobierno central, la Consejería de Economía tuvo ayer que adaptar sus previsiones: se dispara la pérdida de puestos de trabajo hasta los 120.000, más del doble de lo previsto inicialmente y un 20% de lo que se destruirá a nivel nacional. Un dato que sitúa la economía andaluza en los niveles de 1993, la última vez que hubo un desplome del PIB. Es el anuncio oficial de que Andalucía entra en recesión.

El departamento que dirige José Antonio Griñán situó el origen de este retroceso del PIB en la menor oferta en todos los sectores, salvo servicios; en especial, retroceden la construcción y la industria. Y por el lado de la demanda, la producción bajará por los menores niveles de inversión y de consumo. El descenso del consumo interno regional contribuirá a la reducción del PIB andaluz, mientras que el aumento de las exportaciones tendrá una aportación positiva. La Consejería prevé un valor nominal del PIB andaluz similar al del último ejercicio, cifrado en 153.605 millones de euros. Pero en términos reales esto supone un descenso del producto bruto regional del 1,6%.

El agravamiento de la crisis mundial desde octubre, es la justificación que se utiliza para modificar las previsiones que sustentaron los Presupuestos andaluces de 2009, aprobados a finales de diciembre. Por tanto, los presupuestos quedan desfasados. El anuncio de la rectificación de las previsiones para este año, del Gobierno y la Junta, mereció ayer todo tipo de comentarios.

El presidente andaluz y secretario general del PSOE-A, Manuel Chaves, Manuel Chaves, quiso hacer un reparto de las responsabilidades de esta coyuntura económica. En un acto celebrado con militantes socialistas en Sevilla, en el que estuvo acompañado por el vicesecretario general del PSOE, José Blanco, aseguró que han causado la crisis los que "nunca han creído en el estado del bienestar" y los "príncipes de los mercados desregulados que han armado ideológicamente a la derecha". Pidió un esfuerzo "pedagógico" a los dirigentes de su partido para que expliquen a los ciudadanos sobre quién recae la culpa de esta situación.

En su ataque, Chaves recriminó a los líderes nacional y andaluz del PP, Mariano Rajoy y Javier Arenas, por sus mensajes "apocalípticos" y les tachó de "inconscientes" por criticar las ayudas de las administraciones central y autonómica a los bancos "sin pensar en millones de españoles que tienen ahí sus ahorros". También anunció que se "apretará" para que los bancos normalicen el crédito a los ciudadanos y las pymes.

El presidente también dio un repaso a las medidas anticíclicas activadas por Junta y Gobierno y ahondó en la idea de no permitir que se resienta el estado del bienestar y las prestaciones sociales, por lo que justificó recurrir al endeudamiento público. Añadió que estará vigilante a los expedientes de regulación empleo; advirtió que la Junta los examinará con rigor y no aceptará los que sean abusivos o no estén consensuados con los trabajadores.

Poco o nada sorprendió a la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) la modificación en sus previsiones de la Junta. El presidente de la Comisión Económica de la CEA, Manuel Ángel Martín, lamentó haber "acertado" cuando compareció meses atrás en el Parlamento para exponer su visión de los Presupuestos andaluces para 2009, y advirtió que estos "no se ajustaban a la realidad". En su opinión es una mala noticia que se llevará por delante muchos puestos de trabajo y que "sin duda, va a generar más tensión social y más cierres de empresas". Resaltó que la demanda no decae más gracias a las exportaciones: "Eso implica que hay que ser más competitivos para que esa base no se pueda perder".

Ante este panorama, Martín se preguntó qué se hará ahora con los presupuestos andaluces, y apuntó que la Junta debe sentarse a hablar con los agentes sociales para estudiar posibles reformas. Los datos anunciados provocaron también duras críticas de PP e IU. No sólo se oscurece el escenario económico; sino también el político.