La credibilidad que dieron ayer PSOE e IU a la última encuesta del PP, en la que los populares se autoproclaman ganadores de la contienda electoral de 2012 y por mayoría absoluta, no es que fuera poca, es que fue nula. Los dos partidos tiraron por tierra el valor de un sondeo cuyos resultados consideraron están muy lejos de la realidad -ganarían a los socialistas por entre diez doce escaños-, fundamentalmente, por amoldarse al objetivo que persigue quien las paga y por ser un intento de lavar la imagen de su líder, Javier Arenas.

El principio de acción-reacción es el que manejó el PSOE, al partir de que no es nada fortuita la aparición de esta encuesta con el pistoletazo de salida a las municipales que dieron José Luis Rodríguez Zapatero y José Antonio Griñán el pasado sábado en Sevilla, y a los "nervios" y el "cabreo" de los populares ante unos Presupuestos Generales del Estado en los que Andalucía sale reforzada por ser la comunidad que más inversión absorberá, rompiendo así la "ruina" presupuestaria que habían augurado.

La secretaria de Organización del PSOE, Susana Díaz, apuntó que, ante esta situación, Arenas "huye" y se refugia en sondeo que se ha hecho a su medida para corregir su "problema de crédito político" dentro y fuera de su partido. Díaz sustentó esta teoría en los ocho años de Arenas en el Gobierno de Aznar, cuando Andalucía fue "machacada y castigada" presupuestariamente, y "él que pudo hacer algo por su tierra, no hizo nada".

Para devaluar aún más los resultados, recordó que las entrevistas se realizaron tres días antes de la huelga general del 29 de septiembre. Y con todos estos factores, concluyó que el reparto de escaños en el Parlamento está tan alejado de la realidad que "no se lo cree Arenas ni en sueños" y apostilló que le gustaría que hiciera tantas propuestas como esas once encuestas que lleva en lo que va de legislatura.

Para IU, no sólo es el PP el que está equivocado en sus cálculos. Según su coordinador regional, Diego Valderas, si Arenas "no obtendría ni de lejos la mayoría absoluta", el PSOE también "va en caída libre y merecida", mientras sus siglas no sólo salen a flote, sino que salen reforzadas pasando de seis a ocho u once diputados.

Con este volumen de escaños, perfiló a IU como "la fuerza política con capacidad para cambiar las cosas", tanto como para que en Andalucía haya "más izquierda", con un Parlamento el que "haya menos PSOE y menos PP".

Para que salgan estas cuentas, explicó que su formación ganaría un diputado más por provincia y dos en las provincias de Sevilla, Cádiz y Málaga. Algo que vio factible gracias al "respaldo que IU tiene en la calle y que se va a expresar en las urnas", afirmó Valderas, que ha insistido en que "IU va por el buen camino".