El debate acerca del modelo autonómico recrudece, aún más, el enfrentamiento entre socialistas y populares. Los primeros están convencidos de que los llamamientos de sus adversarios políticos a aplicar correcciones sobre el actual sistema esconde la demolición pura y dura del actual Estado de las Autonomías. No extrañan, pues, proclamas como la que hizo ayer la presidenta del PSOE andaluz, Rosa Torres, que comparó a su partido con el "dique robusto que va a frenar los ataques del PP al Estado autonómico".

Según la dirigente socialista, el Estado de las Autonomías "da certidumbre en tiempos completos". Torres aseguró que el actual modelo "no sólo tiene futuro sino que es el futuro". Los socialistas fomentarán el mensaje de defensa y reforzamiento del sistema autonómico desde el convencimiento de que las autonomías "se pueden construir más y mejor". La Ejecutiva regional del PSOE valoró que se fije por ley que cada comunidad tenga un techo de gasto por ejercicio o que cada Administración "sea responsable del gasto que genera".

En ese debate, el presidente del PP andaluz, Javier Arenas, incidió de nuevo en las "muchas cosas" que hay que cambiar y en los "errores" que hay que corregir en un modelo que, recalcó, "no ha fracasado". "Lo que ha fracasado han sido las políticas que han estado gobernando en el Estado de las Autonomías", dijo en un acto en Palomares (Sevilla), en clara alusión a los socialistas. "La autonomía no está en función de los gobiernos, sino que debe estar en función del mejor servicio que se presta al ciudadano", subrayó Arenas.

Dentro del modelo actual, el presidente de la Junta, José Antonio Griñán, ensalzó el papel que desempeñan las diputaciones, cuya supresión fue propuesta por el ex presidente del Gobierno, Felipe González. Para el jefe del Ejecutivo autonómico, las corporaciones provinciales cumplen funciones "importantísimas", sobre todo en los municipios más pequeños, que "merece la pena conservar". En una entrevista en Radio Nacional de España, Griñán destacó que las diputaciones "están en la Constitución y si las quitáramos esos pequeños municipios tendrían grandes problemas en comunicaciones o abastecimiento de aguas", ha precisado.

Muy al contrario de lo propuesto por González, Griñán propuso que todas las comunidades hagan lo que ha hecho Andalucía, un esfuerzo de descentralización hacia diputaciones y ayuntamientos a través de la Ley de Autonomía Local, cuyo modelo "debería implantarse en toda España".

Además de realizar una defensa del modelo autonómico, que ha sido un "gran éxito que debe continuar", el presidente andaluz se decantó por un "federalismo cooperativo" en el que todos los territorios tengan las mismas oportunidades, derechos y obligaciones". Este modelo permitiría, según Griñán, multiplicar la capacidad de actuación desde el conjunto de comunidades en la prestación de servicios públicos, y puso como ejemplo que los requisitos para crear una empresa sean los mismos en todos los territorios o que las políticas activas de empleo tengan un nivel similar.