En la costa del Levante almeriense, se encuentra el lugar ideal para pasar las vacaciones este verano. Un destino familiar donde priman las emociones, el placer por el descanso, sus playas y la libertad en un entorno natural cuidado y seguro, y con propuestas de actividades para todos. Un plan perfecto para los que buscan un verano diferente con niños y adolescentes lejos de la ciudad, en un lugar donde el relax, la calidad de vida y 365 días de luz y mar, serán los perfectos aliados.
Explorar sus tradiciones, saborear la gamba roja y el mejor pescado del Mediterráneo tras una jornada de juegos y sol en la playa, visitar Vera y recordar su pasado de cine, sorprenderse con los espectáculos en sus plazas, pasar un día de diversión en el parque acuático… Vera tiene todos los ingredientes para un verano que recordar.
Diversión para todos
Niños y adultos tienen una cita divertida en Vera gracias a las atracciones del parque acuático de la localidad. Los más atrevidos pueden empezar por el Kamikace, un tobogán de 1,30 metros ideal para los amantes de la velocidad, y continuar con el recientemente inaugurado Tsunami.
En el Aquódromo se puede competir entre todos haciendo una carrera por sus toboganes y continuar por el Tsunami; en Río Aventura, llena de curvas y descensos por las aguas; el Zig Zag en el que los toboganes se cruzan y se enredan y el divertidísimo Cubo Splash que dejará caer sobre los bañistas cientos de litros de agua. Los más pequeños disponen de su propio espacio, Aqualandia.
Deportistas corriendo por el paseo
Cocina con sabor a mar
Y hay otra forma de disfrutar de Vera y es a través de su gastronomía. Los platos que encontraremos aúnan de forma deliciosa los clásicos sabores mediterráneos con la influencia hispano-árabe procedente de Al-Andalus. No hay que dejar de probar el guiso de pelotas, los gurullos con conejo o el ajo colorao. Por supuesto, sin olvidar de la magnífica repostería de la zona con dulces como los hornazos, las torticas de avío o los roscos de vino y anís.
En Vera, además, hay una gran cultura del tapeo, una costumbre barata y rica gracias a la cual el visitante podrá degustar la mejor cocina tradicional con productos y condimentos de la zona. Y por supuesto, una visita obligada merecen los chiringuitos que hay en las playas de Vera donde reponer fuerzas tras un día de playa.
Turismo activo
En Vera existen muchas opciones para practicar deporte. El Centro Deportivo Puerto Rey dispone de instalaciones para jugar al paddel o al tenis, y el Parque Ocio Infantil para los más pequeños con camas elásticas, hinchables, karts, minigolf y fútbol, todo ello cerca del mar y rodeado de palmeras. Otra opción es hacer rutas a caballo o excursiones a pie por los alrededores. Por último, una batalla de paintball, un descenso en kayak o tomar clases en una escuela de vela, completan la oferta de turismo activo.
Un auténtico paraíso natural
La costa de Vera es un entorno privilegiado formado por playas de arena fina y una flora única en toda la región. Si se suman sus aguas cristalinas y su limpieza, se convierte en un lugar perfecto para ir con los niños. Estas playas cuentan con vigilancia, aseos, duchas y en diferentes puntos pueden disfrutar de zonas con juegos infantiles.
La primera playa que se encuentra empezando desde el sur es Las Marinas-Bolaga situada cerca de la desembocadura del río Antas, la Laguna de Puerto Rey, espacio natural protegido donde podremos observar aves. Seguidamente se llega a las playas de Puerto Rey y El Playazo, donde se concentra principalmente la oferta hotelera del municipio, y en la parte más septentrional, Cala Marqués.
En definitiva, en cualquier punto de la costa veratense el visitante encontrará un remanso de tranquilidad donde pasar un divertido día en familia.
