Un congreso sin la música prevista

La organización del 41 Congreso Federal del PSOE tenía prevista una gran fiesta para "subir el ánimo" de los delegados y militantes socialistas que están viviendo, según comentan por los pasillos de Fibes, "el peor momento" tras los numerosos casos judiciales en el entorno del presidente Pedro Sánchez. Y para eso habían previsto un programa lúdico con el que amenizar la jornada de la tarde del sábado mientras se están dirimiendo los nuevos cargos de la Ejecutiva Federal. El programa previsto buscaba dar un toque andaluz al congreso y por eso habían previsto las actuaciones de los grupos andaluces de rock alternativo que reivindicaran la cultura andaluza.

La idea era que actuasen en un escenario que hay preparado en la llamada zona de ocio pero ha sido sustituida por una DJ que, en un enfoque menos festivo, alterna música ambiente con canciones para bailar y encender los ánimos de los asistentes. El concierto estaba previsto para la noche del sábado. La organización del Congreso Federal ha considerado que no era oportuno celebrar tanta fiesta cuando el país sigue de luto por los fallecidos tras la DANA de Valencia. Han preferido hacer un reconocimiento a los valencianos que todavía lo siguen pasando mal en las palabras de la ministra Diana Morant que han generado aplausos encendidos en el plenario.

Los socialistas andaluces tenían el reto de mejorar el último congreso del partido que se celebró en Valencia y que, además de unas enormes paellas muy celebradas por los asistentes que todavía hoy se comenta por los pasillos de este cónclave, se cerró con fuegos artificiales y una mascletá en el más puro estilo valenciano.

Las circunstancias han hecho que el toque andaluz se haya quedado en el cátering contratado para el almuerzo de los delegados, el del Mercado del Barranco de Sevilla, en el que han ofrecido productos típicos, empezando por la ensaladilla y en el que se incluían los montaditos de pringá.