El ex consejero de Empleo de la Junta Antonio Fernández eludió ayer un nuevo varapalo de la juez Mercedes Alaya, al presentar el recurso contra su ingreso en prisión directamente ante la Audiencia de Sevilla, ya que era poco probable en este momento un cambio de opinión en la instructora que decidió encarcelarle el pasado 24 de abril. La defensa podía haber recurrido el auto de prisión mediante un recurso de reforma que resolvería precisamente la propia Alaya, pero finalmente decidió presentar una apelación directamente ante la Audiencia Provincial de Sevilla, que deberá decidir ahora sobre si ratifica la existencia de riesgo de fuga por parte de Antonio Fernández o de que influya en los próximos testigos o imputados que deben comparecer en la investigación de los ERE fraudulentos.

Antonio Fernández está imputado por seis delitos de prevaricación, cohecho, malversación de caudales públicos, falsedad en documento mercantil, fraude en la obtención de subvenciones y negociación prohibida a funcionarios. Su abogado se opuso su ingreso en prisión, rechazando los presupuestos de la Fiscalía Anticorrupción y de la instructora, y alegando que con su encarcelamiento quedaría "estigmatizado social y profesionalmente" y se vulneraría el derecho a la presunción de inocencia, y recordó que hay casos con condenas en los que no se ha acordado la prisión. El letrado citó expresamente al ex presidente autonómico Balear Jaume Matas, condenado a seis años de prisión por el caso Palma Arena, y del presidente del Sevilla, José María del Nido, condenado a siete años y medio por el caso Minutas, para argumentar que ambos permanecen en libertad tras recurrir la sentencia.