Andalucía

Un impulso de la UE para que Cádiz levante el vuelo

  • La provincia dispone de 2.329 millones de euros hasta 2020 para diversos proyectos

Vista desde lo alto de uno de los pilares del puente de la Constitución de 1812, en Cádiz.

Vista desde lo alto de uno de los pilares del puente de la Constitución de 1812, en Cádiz. / Jesús Marín

La investigadora Sonia Torres Sánchez se incorporó el 12 de noviembre al Cibersam, el gran brazo científico de la salud mental en España, para estudiar desde la Universidad de Cádiz el trastorno bipolar. La bipolaridad, que afecta aproximadamente al 3% de la población, se caracteriza por alternar ciclos de euforia y depresión. En este momento se tratan de identificar las causas de la enfermedad y los cambios que registra el cerebro cuando pasa de un estado a otro o cuando reacciona ante un medicamento. En este sentido, la misión de Sonia Torres es estudiar esos cambios a nivel celular, con la finalidad última de hallar fármacos más eficaces.

La particularidad del contrato que consolida en la Universidad de Cádiz a esta doctora, que el año pasado fue premio extraordinario, reside en que su sueldo se pagará con dinero de la Unión Europea. En este momento hay 18 convocatorias activas en la provincia gaditana para acceder a fondos comunitarios. Las hay para apoyar a emprendedores y autónomos, para contratar a jóvenes parados, para suministrar circulante o incorporar tecnología a las empresas y, entre otras iniciativas, crear puntos de recarga de automóviles eléctricos.

Cádiz dispone hasta 2020 de 2.329 millones de la Unión Europea. De esta cantidad, 898 millones de euros los gestiona el Gobierno central y 1.431 la Junta de Andalucía. En esta última cantidad figuran, además, 387 millones de euros procedentes de los 1.030 millones adicionales que Bruselas ha destinado a la región después de que se perdiera el estribo de la convergencia y la renta per cápita cayera por debajo del 75% de la media europea.

Este presupuesto se podrá ejecutar, además, combinando todos programas, estrategias y fondos de la UE. En román paladino, se pone toda la carne en el asador con la ambición de sacudir las debilidades crónicas del tejido productivo y crear empleo. Es la denominada inversión territorial integrada (ITI), una solución ideada en por la UE que permite utilizar todos los recursos y estrategias disponibles en una única zona geográfica.

La economía gaditana se caracteriza por sus debilidades, pero también por sus contradicciones. Posee uno de los tejidos productivos más variados del panorama andaluz: predomina la metalurgia y la agroindustria, pero la actividad portuaria, con Algeciras a la cabeza, y la pesquera, así como los astilleros y el refino de petróleo son también importantes, además del turismo o la marroquinería. Además, su actividad exportadora es potente. Tiene la tasa de paro más alta del país.

Un total de 138 empresas, entidades públicas y administraciones han participado en la definición de los 12 sectores estratégicos a los que se encomienda el futuro de esta provincia. Bajo la bandera de la innovación y la tecnología, la competitividad y el emprendimiento, y la internacionalización han diseñado medio centenar de iniciativas para dar músculo a la economía local.

Se han previsto más de 45 millones de euros para respaldar la innovación agroidustrial, la mejora de explotaciones agrícolas y los regadíos, 13 millones para apoyar a los agricultores jóvenes y 20 millones para crear una red de suelo industrial capaz de atraer inversiones. El turismo absorberá otros 85 millones para potenciar la oferta de los pueblos blancos, las actividades vinculadas a la ornitología, el viento, la bicicleta o la montaña.

A esta cifra se suman otros 13 millones para infraestructuras relacionadas con el flamenco, como el museo de Camarón, cuyas obras acaban de empezar en San Fernando, o el centro de interpretación Paco de Lucía, en Algeciras, y el museo del flamenco, en fase más embrionaria, en Jerez.

También incluye 40 millones para la formación en los sectores estratégicos, espacios científicos como el Inibica, instituto de ciencias biomédicas, que aglutina a los investigadores del SAS y de la Universidad de Cádiz, al que también pertenece Sonia Torres. Además, ha previsto equipamientos para la innovación empresarial por importe de 60 millones de euros, que comprenden desde el Centro de Fabricación Avanzada, cuyas obras están a punto de finalizar, al de transferencia empresarial, de innovación logística, del vino o del motor, en fase más incipiente.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios