Juicio a bretón

Los peritos no pueden precisar si Bretón fue a la finca la mañana del 8 de octubre

  • Los expertos niegan que el acusado apagara el móvil "físicamente" entre las 13:58 y las 17:49

Aunque el análisis del móvil de Bretón ha arrojado a la causa cuantiosa información sobre sus movimientos en los días previos al suceso, los peritos fueron ayer incapaces de precisar algunos movimientos claves del acusado el mismo día del suceso. En concreto, ninguno de los expertos que testificó ayer fue capaz de determinar si el presunto asesino visitó la mañana del 8 de octubre la finca de su familia de Las Quemadillas para preparar la hoguera en la que supuestamente quemó a sus hijos, tal y como sostienen la acusación particular y la Fiscalía. Los peritos aportaron datos contradictorios sobre los movimientos de Bretón aquella mañana, siempre basándose en las señales remitidas por las antenas de telefonía.

La versión del acusado es que estuvo toda la mañana en la casa de su hermana, en San Lorenzo, cuidando de sus sobrinos y de sus hijos mientras Catalina y su marido hacían la compra. Las contradicciones entre los peritos surgieron ayer a propósito de una llamada infructuosa que Bretón hizo a Ruth a las 10:57. La llamada fue captada por una antena situada junto al Hospital Militar, en lugar de por la más cercana a San Lorenzo. Los expertos en telecomunicaciones del Cuerpo Nacional de Policía hicieron una prueba consistente en llamar 110 veces desde un vehículo ubicado junto a la casa de San Lorenzo, y en ninguno de esos casos intervino la estación del Hospital Militar, lo que llevaría a concluir que Bretón estaba fuera en la mañana del día 8.

El experto en telecomunicaciones Luis Enrique Hellín, sin embargo, determinó que la llamada pudo haberse hecho "a la altura" de la casa de Catalina, lo que corroboraría la propia versión de Bretón. "Un móvil no se conecta a la antena más cercana, sino a la que dé mayor calidad", determinó Hellín, quien concluyó que no es posible determinar cuán cerca estaba de la vivienda. Dijo, además, que en pocos metros es posible cambiar de repetidor.

El experto llegó a otra conclusión controvertida: José Bretón nunca apagó su teléfono móvil el día del suceso, sino que estuvo sin conexión entre las 13:58 -cuando realizó la segunda llamada infructuosa a Ruth Ortiz desde Las Quemadas- y las 17:49 -cuando la red wifi lo localiza entre Carlos III y la avenida de la Libertad-. Las acusaciones sostenían hasta ahora que Bretón apagó el móvil para no estar localizado mientras supuestamente cometía el crimen. La Policía, por otra parte, determinó que el rastro del iphone es compatible con el desplazamiento relatado por Bretón entre Las Quemadillas y el Parque Cruz Conde.

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