Una vez más un compareciente se negó a declarar ante la comisión que investiga las irregularidades en las ayudas a la formación concedidas por la Junta. Esta ha sido la tónica general desde que este órgano parlamentario ha entrado en la fase de interrogatorios a altos cargos de la Junta. En esta ocasión fue el ex director general de Formación Profesional para el Empleo Carlos Cañavate quien se negó a responder a las preguntas de los miembros de la comisión. Su justificación, como el resto de compañeros que habían decidido lo mismo con anterioridad, es que al estar siendo investigado por vía judicial, sus declaraciones en sede parlamentaria pueden perjudicarle. El ex director general de Formación declaró a la UCO que "había una cantidad aproximada de 950 millones de euros en subvenciones sin justificar".

Cañavate aseguró haber visto como algunos comparecientes "habían fracasado en el intento" de compatibilizar las obligaciones ante la comisión y la justicia. Cañavate insistió en que su situación es "especialmente complicada" y en que si tiene que elegir entre la obligación de cumplir con la comisión o con la justicia, preferirá siempre la segunda opción y "sin ningún tipo de interferencia".

La diputada del PP-A Teresa Ruiz-Sillero destacó que Cañavate fue "de los primeros en levantar las alfombras" en la Administración andaluza. La diputada popular aseguró que Cañavate no debería tener "nada que temer" porque no está imputado por lo que se preguntó si lo que en realidad "peligra" es su puesto como asesor en el Ayuntamiento de Marbella, gobernado por el PSOE.

La diputada de C's Marta Bosquet se mostró "decepcionada y sorprendida" por la decisión del ex director general de Formación, ya que desde su grupo tenían la "esperanza" de que iba a aclarar bastantes cuestiones, dada su declaración previa ante la Guardia Civil.

La comparecencia de ayer del ex director gerente de la Fundación Forja XXI Juan José Ruiz Márquez fue suspendida.