Habrá múltiples análisis del por qué, variadas interpretaciones de la razón, pero sea cual sea la conclusión a la que se llegue, los andaluces que menos fueron a votar el pasado domingo fueron los gaditanos. Eso son los datos fríos, datos que dan para reflexionar. 

No es la primera vez que  Cádiz está a la cabeza de la abstención, pero  el 25-M, en la primeras elecciones andaluzas separadas de las generales desde hace mucho, la participación  fue de poco más de la mitad del censo electoral, un 54,39%, 12 puntos menos que en las anteriores y ocho puntos por  debajo que la media andaluza.

De los tres comicios que se han celebrado en menos de un año, el del domingo fue el del mayor abstención en la provincia, que en los tres está por debajo de la media de participación de la comunidad autónoma. Así, en los primeros, las municipales de mayo de 2011, un 59,47% de los gaditanos con derecho a voto lo ejercieron, un 40% no lo hizo. La media andaluza llegaba casi al 66% de participación. 

Las elecciones generales fueron las que más animaron a salir a votar al casi millón de electores gaditanos, con un 65% de participación. Eso sí, son dos puntos por debajo que en las de 2008 y cinco puntos por debajo de la media de la participación de los electores andaluces.

En estas autonómicas se ha alcanzado más de un 45% de abstenciones, siendo Cádiz la provincia que menos ha participado, seguida de Málaga.  Municipios como Algeciras, Barbate, Chiclana, La Línea o Sanlúcar no han superado el 50% de participación.

Los datos sin embargo quedan por encima, como no, de las últimas elecciones europeas , donde se abstuvo el 65% de los gaditanos. O el referéndum del Estatuto Andaluz, que obtuvo  el récord con nada menos que un 69% de posibles votantes que no lo fueron.