"Y también hablo inglés". Los demandantes de empleo se han dado cuenta de que en una época en la que escasean las ofertas laborales, el mejor, es el que normalmente se lleva el gato al agua. El mejor o el más cualificado a todos los niveles. Son conscientes de que no sólo son los empresarios y los responsables de recursos humanos los que deben poner las pautas para contratar, sino que ellos mismos son los que deben reclamar a las administraciones cómo quieren su formación.

Marifrán Carazo, concejal de Turismo, Pymes e Imfe, explicó ayer que por primera vez han sido los usuarios de la agencia municipal de empleo los que han pedido formación complementaria en idiomas, concretamente en inglés, para acceder a diferentes sectores laborales. "Una demanda que poco a poco vamos cumpliendo".

La responsable del área realizó ayer el balance de 2010 y las previsiones para 2011. Un análisis, según dijo, de un año "duro y en el que la imaginación ha jugado un papel fundamental para optimizar todos los recursos".

El 2010 se cerró con 25.602 personas paradas en la capital. Para todas ellas, la agencia de colocación municipal, logró captar 18.922 ofertas y formalizar 1.382 contratos, 28 más que en 2009, aunque hay que lamentar que sólo el 5,2% de los mismos han sido indefinidos, "siendo la obra y servicio y la eventualidad la marca de las nuevas contrataciones", comentó la concejal.

Las contrataciones logradas se realizaron mayoritariamente para el tramo de edad de 22 a 40 años y especialmente en los sectores de servicios a empresas, personales, comercio y hostelería que suelen ser los que generan más ofertas.

Marifrán Carazo destacó el impulso que se ha dado al desarrollo empresarial en el 2010. Durante el año pasado se atendieron a 682 personas emprendedoras nuevas que demandaron asesoramiento. Fruto de estas atenciones en el Imfe se prestó apoyo y analizó la viabilidad de 138 proyectos empresariales, de los cuales, 58% fueron iniciativas de mujeres. La responsable del servicio destacó la implicación de todos estos usuarios para poner en marcha 62 nuevas empresas (en 2009 fueron 54) con las que salir del pozo del desempleo y buscar una salida a largos periodo de inactividad.

Por último, Carazo subrayó el servicio de consolidación ofrecido a 200 empresas y las 156 ayudas gestionados desde el servicio de empleo del Ayuntamiento de Granada.