El misterio de la felicidad. Comedia romántica, Argentina, 2013, 99 min. Dirección: Daniel Burman. Guión: Daniel Burman y Sergio Dubcovsky. Fotografía: Daniel Ortega. Música: Nicolás Cota. Intérpretes: Guillermo Francella, Inés Estévez, Alejandro Awada, Sergio Boris, María Fiorentino, Fabián Arenillas.

Ni que se hubieran puesto de acuerdo los distribuidores españoles. Dos títulos argentinos protagonizados por Guillermo Francella y con final en las playas brasileñas estrenados en apenas un mes. En fin, es lo que toca, a la espera de novedades protagonizadas por Ricardo Darín, otro fijo de la taquilla madura con acento porteño.

Sea como fuere, el noveno filme del acomodaticio y complaciente Daniel Burman (El abrazo partido, El nido vacío, Dos hermanos) se postula como comedia amable y sabia sobre la amistad masculina, la diferencia de los sexos y las segundas oportunidades con un esquema teledirigido al que le vemos el desenlace media hora antes de que llegue, a saber, cuando las pesquisas de un pequeño empresario por encontrar a su socio y amigo del alma desaparecido apuntan al horizonte de los viejos sueños incumplidos y los anhelos de juventud truncados por la (falsa) comodidad de la vida profesional.

Ahí donde Burman quiere poner su moraleja liberal y liberadora, su película se empeña en afirmar el conservadurismo comercial de siempre con unas formas planas demasiado aferradas a ese realismo costumbrista de verborrea ingeniosa y simpatía dramática que lo fía todo al encanto irresistible (sic) de sus intérpretes, un Francella y una Inés Estévez que modulan los vaivenes entre el exceso y los apuntes de romance que nos dejará a cada oveja con su pareja y todos tan contentos.