El cineasta mallorquín Agustí Villaronga, ha sido galardonada esta noche con el premio Goya al mejor director de 2010 por su película Pa negre, durante la XXV edición de estos galardones, en la que se ha impuesto a Álex de la Iglesia, Icíar Bollaín y Rodrigo Cortés. El realizador, que ha recogido su estatuilla de manos de Rosa María Sardá y Juanjo Puigcorbé, ha agradecido la entrega del premio a todo el equipo que "ha hecho posible Pa negre".

"Quiero compartir el Goya con muchísima gente, a todos los que han hecho posible Pa negre, y ya que estoy aquí, que cuesta mucho estar aquí, también a las personas que han trabajado conmigo desde que empecé. Gracias", ha añadido Villaronga.

El cineasta ha confesado no saber "muy bien cuál ha sido la clave" para que su película resultara ser la gran triunfadora de la noche, y ha dicho que el premio supone un reconocimiento al "cine catalán, un cine inteligente e interesante". "No sé cuál ha sido la clave para que esta película se imponga a las otras. No ha habido nada premeditado, fue después del Festival de San Sebastián cuando nos dimos cuenta de que al público le gustaba y de ahí en adelante todo han sido sorpresas buenas", ha admitido.

Por su parte, la productora del filme, Isona Passola, ha mostrado su satisfacción al haber sido reconocida la labor de "un hombre con mucho talento". "Él se lo merecía. Todo el mundo tenía muchas ganas de que se llevara por fin un Goya. Es un hombre con mucho talento, muy bueno y la Academia ha premiado su trayectoria", ha afirmado.

La cinta, un drama basado en la novela homónima de Emili Teixidor ambientado en la postguerra y rodado en catalán en los alrededores de la localidad barcelonesa de Vic, cuenta una historia de represalias tras la Guerra Civil española, aliñada con los secretos de una familia y la brutalidad de un pueblo.

Profesor de Imagen, director artístico, decorador, estilista y realizador, Villaronga ha sido considerado desde sus inicios como uno de los directores españoles "de culto" y más próximos al concepto de cine de autor. Aunque nació hace 58 años en Palma de Mallorca, muy joven viajó a Barcelona donde se licenció en Historia del Arte en 1975, año en el que también rodó su primer corto Anta mujer. Comenzó entonces una breve carrera como actor teatral en la compañía de Nuria Espert, con la que estuvo tres años recorriendo Europa y América.

Debutó como director con el largometraje Tras el cristal (1986) que, protagonizado por Marisa Paredes, impactó en la crítica de la Berlinale con su potente suspense e imágenes desgarradoras y obtuvo el Gran Premio del Cinema de Barcelona, el de la Crítica de Mallorca y el Ondas de Madrid. Con su siguiente largo, El niño de la luna (1989), obtuvo su primer Goya por el mejor guión original y fue premio Ojo Crítico de RNE.

Después vendrían el documental Al Andalus (1992), producido por el MOMA de Nueva York; El pasajero clandestino (1996); 99.9 (1997), El mar (2000), y en 2002, Aro Tolbukhin/En la mente del asesino, codirigida con Lidia Zimmerman e Isaac Racine, que obtuvo siete Premios Ariel en México.

Con Pa negre este cineasta a quien la Sociedad Cinematográfica del Centro Lincoln de Nueva York rindió homenaje ese año, ha optado a 14 Premios Goya, de los que ha conseguido nueve, entre ellos, el de mejor película, mejor actriz protagonista y mejor actriz de reparto.