Isaac Garrido, futbolista del Federico Mayo expulsado en el partido contra el Benalup de la Tercera Andaluza sénior por morder a un jugador contrario y que tras la expulsión agredió al árbitro del encuentro, Molina Sánchez, ha sido sancionado con 20 partidos de suspensión por el Comité de Competición de Cádiz, que además ha sancionado al club jerezano con la pérdida de un punto en la clasificación general en aplicación del artículo 72 al acumular tres advertencias.

El fallo de Competición comprende 5 partidos de suspensión y multa accesoria por "agredir a un contrario, sin generar lesión (dicha acción conlleva una advertencia a efectos de ciclo en aplicación del artículo 72), más 15 partidos de suspensión y multa accesoria por agredir al árbitro, siendo una acción única y no generando resultado dañoso (dicha acción conlleva dos advertencias a efectos de ciclos en aplicación del artículo 72)", con lo que en total son 20 partidos de suspensión.

Como quiera que el Federico Mayo ha completado el ciclo de tres advertencias, Competición acuerda la pérdida de un punto en la clasificación general para el club mayista, que tomó la decisión de expulsar al jugador. El Federico Mayo, que está peleando el ascenso, mantiene la segunda posición de la tabla pero con 28 puntos, a dos del líder y uno por encima del Benalup.