El Arcos pone a prueba su buen arranque de Liga esta jornada ante el Salerm Puente Genil en el Antonio Barbadillo mañana a las doce. Los serranos llegan a esta cita reforzados tras derrotar al Coria en el Guadalquivir y con Lebrón y Giráldez como únicas bajas. El delantero, de todos modos, ya ha comenzado a entrenar con el grupo y se encuentra en la cuenta atrás de su recuperación, aunque aún no está listo para reaparecer.

Pepe Bermúdez, entrenador del cuadro blanco, admite que el equipo tiene ganas de ofrecer una victoria a la afición tras el empate en casa ante el Ciudad de Lucena y que se encuentra "fuerte mentalmente tras derrotar al Coria. Cuando ganas, la semana se afronta con más alegría pero el equipo está trabajando bien. Nuestra premisa es ser una piña, tener compromiso y actitud, por eso tenemos dieciséis puntos en estos momentos. Ellos saben qué función tiene cada uno en el vestuario y el grupo humano es bueno, hay feeling y es el camino a seguir. Nuestros futbolistas trabajan, trabajan, corren, pelean y disfrutan".

La cita ante la escuadra de Juanmi Puentenueva la considera "complicada. Nos vamos a medir a un buen equipo, que está bien trabajado pero que no ha arrancado como ellos quisieran. De todos modos, vendrán a ponernos las cosas difíciles y tenemos que seguir con la misma línea de trabajo para que los tres puntos se queden en Arcos".

El preparador arcense, por último, hace un llamamiento a la afición para que "nos ayude a sacar el partido adelante. Ojalá el tiempo acompañe y podamos disfrutar de un buen encuentro. En el último partido en casa no ganamos, pero me quedo con el aplauso de nuestros aficionados a los chavales reconociendo el trabajo que habían realizado en el campo. Los futbolistas lo van a dar todo y animo a los dudosos a que acudan al campo".