Derrota por la mínima del Atlético Sanluqueño en el campo de la Balona. El conjunto de Abel Gómez controló el juego en la primera parte, pero se mostró romo en ataque y acabó pagando la mejoría local en una segunda parte con más espacios. Finalmente, un gol de Mikel en la segunda mitad decantó la balanza a favor del cuadro entrenador por Antonio Calderón, dejando sin puntuar a los verdiblancos.

El choque comenzó con ambos equipos demasiado encorsetados, sin arriesgar el esférico y con un fútbol demasiado espeso, difícil de digerir para los espectadores. Con el paso de los minutos el decorado no mejoró en demasía, pero sí dejó mejores sensaciones en el Sanluqueño, que lograba hilar posesiones más largas que dejaban sensación de peligro hasta los tres cuartos de campo, ya que luego acababan diluyéndose en la defensa local, muy concentrada en todo el choque.

Las ocasiones a lo largo de los primeros cuarenta y cinco minutos brillaron por su ausencia. Por los visitantes, la más clara llegó con un remate desviado de Peter dentro del área y por los locales un par de faltas botadas por Manu Molina, la segunda de ellas en el descuento significó el primer lanzamiento entre los tres palos del choque.

Sin tiempo para más se llegó al final de una primera mitad muy igualada, con pocas oportunidades y con las espadas en todo lo alto de cara al segundo acto.

Tras el descanso, el Sanluqueño comenzó avisando con una buena jugada individual de Peli, cuyo centro controló Peter para revolverse dentro del área, aunque en la definición mandó el esférico justo a las manos de Javi Montoya. Tras esta ocasión inicial del equipo de Abel Gómez, el decorado del partido cambió. La entrada de Koroma fue providencial para la Balona, que ganó en verticalidad y entrada por banda.

Precisamente en una recuperación suya en la frontal llegaba la jugada del gol tras una acción perfecta de Pito Camacho sorteando rivales en la frontal hasta trazar un pase medido al palo opuesto para que apareciera Mikel Fernández y conectara un trallazo ajustado al palo imparable para Isma Gil.

El tanto acabó por borrar del terreno de juego al Sanluqueño, al que las piernas empezaron a fallar dejando más espacios que la Balona no aprovechó para sentenciar. Además, los cambios de Abel fueron ofensivos, facilitando las acciones a la contra de su rival, bien parapetado atrás y haciendo del orden y el sacrificio sus mejores armas.

Hasta el final el Sanluqueño no tuvo ninguna ocasión clara de empatar, mientras que la Balona pudo hacerlo en una vaselina de Santi Luque o en una entrada de Koroma por la izquierda que Javi Forján no pudo culminar al encontrarse con el meta verdiblanco tras un taconazo magistral.

Segunda derrota consecutiva y cuarto partido sin ganar para un Sanluqueño que atraviesa un momento algo espeso en cuanto a juego y resultados. En la próxima jornada, el equipo de Abel Gómez recibirá en El Palmar a uno de los mejores conjuntos de la categoría, el Marbella del Pirata Esteban Granero.