El Barcelona no falló en Mallorca, pese a las ausencias de Puyol, Xavi, Daniel y Valdés, y se impuso al cuadro local en el estadio Iberostar por 0-3, un resultado que le permite ser más líder y mantener las distancias con el Real Madrid. Los goles del cuadro azulgrana llevaron la firma del tridente formado por Messi, Villa y Pedro y, sobre todo, el tanto del argentino en la primera parte fue decisivo, ya que hasta ese momento, minuto 38, los anfitriones controlaban perfectamente el partido.

Con su gol, Messi encabeza en solitario la lista de goleadores, mientras que Villa ya suma 17, superando a lo que hizo Zlatan Ibrahimovic la pasada temporada. El cuadro de Guardiola quiso ejercer de líder de la Liga desde el inicio del partido, sin preocuparse de las bajas en sus filas -jugaron de inicio Adriano, Keita y Maxwell, con Abidal en el sitio de Puyol- con la intención de imponer su autoridad, siempre monopolizando el balón, en todas las zonas del campo.

Pero se encontró con un Mallorca valiente y muy bien plantado sobre el terreno de juego. El equipo de Laudrup hizo que su rival corriera sin parar, con una defensa en línea y presionando arriba. No se limitó a ver cómo circula la pelota de un lado a otro, siempre al acecho del error para montar el contragolpe. La prueba más evidente de los problemas que tuvo el Barça fue la escasa producción ofensiva de Messi, Villa y Pedro, ya que el primer aviso serio a la portería defendida por Aouate no llegó hasta el minuto 30, con un disparo alto de Messi, que encaró la portería balear libre de marcaje.

El fallo de la Pulga supuso un punto de inflexión en el partido. El Mallorca empezó a pagar el notable esfuerzo físico desplegado hasta entonces y sus marcajes ya no fueron tan eficaces. En el minuto 37, una obra de arte creada entre Keita y Messi rompió al equipo balear. El africano se inspiró en Laudrup para levantar, de cuchara, el balón con la misma técnica y calidad que lo hacía el danés, y el argentino marcó de vaselina y de cabeza ante la salida desesperada del portero de la escuadra balear. No estaban Puyol, Alves ni Xavi, es cierto, pero con el mínimo esfuerzo, los visitantes ya tenían el partido de cara.

El Mallorca le puso músculo y garra a las acciones en la segunda parte como única manera de equilibrar el marcador, pero el Barça ya se parecía mucho al de siempre, es decir, dueño del balón, apretando en la salida del rival y con grandes espacios. Todo eso se tradujo en el segundo tanto del Barcelona, obra de Villa, que arrancando en posición dudosa, sentenció, prácticamente las acciones.

El broche de oro lo puso Pedro con otro golazo, y ya el Mallorca se hundió de manera definitiva. En las filas del Barça dio tiempo al debut del defensa Montoya, que sustituyó en los últimos minutos al brasileño Adriano, y en las del Mallorca, se estrenó en Palma el japonés Akihiro. Al final, triunfo del Barcelona en casa del Mallorca para seguir en lo más alto de la tabla y confirmar, que pese a las bajas, tiene suficiente equipo para llevarse los tres puntos ante un rival que sigue en la zona media de la clasificación.

mallorca: Aouate; Cendrós, Rubén, Nunes, Ayoze; Nsue, Martí, De Guzmán (Tejera, 71'), Joao Víctor (Pereira, 60'), Castro (Akihiro, 68'); y Webó. Barcelona: Pinto; Adriano (Montoya, 85'), Piqué, Abidal, Maxwell; Keita, Busquets, Iniesta; Messi, Villa (Bojan, 70'), Pedro (Afellay, 70') Goles: 0-1 (38') Messi. 0-2 (56') Villa. 0-3 (65') Pedro. Árbitro: Velasco Carballo (madrileño). Amonestó a Martí. Incidencias: Encuentro correspondiente a la vigesimoquinta jornada del campeonato de Liga disputado en el estadio Iberostar ante la presencia de 21.227 espectadores.