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Coronación en el Circuito de JeRea

  • Desde 1985 hasta hoy, sólo otro piloto ha sido coronado también en este trazado como rey en una categoría de motos Su mujer, a punto de dar a luz, no le abandona en esta conquista que llega tras siete años en SBK

Jonathan Rea posa en el Circuito de Jerez con Tatia, su esposa, y su hijo Jake.

Jonathan Rea posa en el Circuito de Jerez con Tatia, su esposa, y su hijo Jake. / Manuel Aranda

ESTE no es un domingo cualquiera para el Circuito de Jerez. Desde que se construyó en 1985, ¿saben cuantos campeones del mundo de motos se han coronado en este trazado? Lo diré: sólo uno. Y este 20 de septiembre de 2015, llegará el segundo con la proclamación de Jonathan Rea como rey de Superbikes. Todo un acontecimiento, pues no todos los días alguien se convierte en el mejor del planeta.

Con estas referencias, nadie duda que será una coronación emotiva, entre andaluza e irish. De hecho, esta especialidad es un reflejo de lo cotidiano, pues cuenta con motos derivadas de la producción en serie y motores que van desde los 750cc, hasta los 1.200cc. Superbikes fue considerada erróneamente como 'cementerio de elefantes' del motociclismo, pues a él llegaban para jubilarse algunas figuras de la clase reina o la actual MotoGP. Por el contrario, es un campeonato que unifica juventud y talento, sin renunciar a sabios veteranos.

Digamos que SBK posee una filosofía más familiar de las carreras, manteniendo un espíritu de dos batallas en un mismo día, algo que no tiene MotoGP. Se vive un gran ambiente y una alta competencia, con estrellas cercanas al público. Así lo hemos comprobado, precisamente con el hombre que acapara la máxima atención dominical en Jerez. Su nombre es Jonathan Rea, nacido en Irlanda del Norte hace 28 años, al que no es difícil verle jugar con su hijo pequeño cuando se baja de la moto. No va de actor, es sencillo y humilde. "Siendo muy pequeño, mi abuelo le dijo a mi padre que yo iba a ser campeón del mundo. Ese ha sido un factor de motivación importante para mí", explica con serenidad impropia de deportista acelerado.

Rea maquilla muy bien esa locura que debe tener todo piloto de motos para hacer lo que hace. Tiene apariencia de sacerdote: dulce, sereno, aparentemente equilibrado. Pero, cuando sube a su Kawasaki con más de 200 caballos, se transforma en un meteoro inalcanzable. Ha subido al podio en las veinte pruebas disputadas hasta ahora en 2015, con un tercer puesto como peor resultado. "Mi mentalidad de toda la temporada ha sido la de ganar todas las carreras que podía. Así que en esta de Jerez voy a ir también por la victoria", comenta el irlandés visiblemente seguro. Y añade: "Si no ganase o subiese el podio, no sería una buena forma de vencer el Campeonato. Está a mi alcance. Sólo tengo que mantener la concentración".

Después de siete años en el Mundial de Superbikes, Jonathan Rea ha logrado en 2015 el nivel más alto y productivo de su carrera deportiva. Tras una larga fidelidad a Honda, este año se integró en la escudería oficial de Kawasaki y va a darles el primer título de marcas a este prestigioso fabricante. Sus éxitos tienen incluso color español pues el equipo al que colma de gloria (Provec Racing) abandera la vanguardia tecnológica de nuestro país. Rea, se siente en deuda con ellos: "Tengo que agradecer a Kawasaki que me haya dado la moto para hacer bien mi trabajo y tener un gran equipo a mi alrededor".

Viendo a Jonathan Rea en acción, me recuerda a Wayne Rainey, fino, elegante, rapidísimo, certero. Nada que ver con el británico más laureado de Superbikes, Carl Fogarty, que basaba en los excesos algunos de sus grandes méritos. Rea no tiene ese ímpetu, es un irlandés muy equilibrado, casi matemático, por lo eficiente de sus resultados. Incluso en sus afirmaciones, no muestra excesos de adrenalina: "He trabajado toda mi carrera para este momento y estoy más emocionado que nervioso. Sólo tengo que asegurarme de que no cometo ningún error" y aporta una perla mística: "Cada niño quiere ser un campeón del mundo y he tenido este sueño desde que tenía cinco años de edad. Ahora se ha convertido en una realidad que puede suceder, es una situación extraña".

En definitiva, Jonathan Rea escribirá hoy una memorable página en la historia de campeones coronados en Jerez y tendrá el tiempo justo para celebrarlo, pues su mujer está ya contando los días para dar a luz. Es decir, el segundo hijo del piloto traerá bajo el brazo el título que tanto soñaba su padre e incluso el abuelo. Las motos, tienen ese duende…

(*) Jesús Benítez es periodista y escritor. Fue Editor Jefe del Diario Marca y, durante más de una década, siguió todos los grandes premios del Mundial de Motociclismo. A comienzos de los 90, ejerció varios años como jefe de prensa del Circuito de Jerez.

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