Un solitario tanto de Saúl Ñíguez bastó a la selección española sub 21 para ganar 0-1 a Hungría en el estreno de Albert Celades, que inició su era en el banquillo con una victoria con la que selló la clasificación de su equipo para la eliminatoria previa al Europeo de la República Checa que se disputará el próximo mes de junio.

El cambio de ciclo en la sub 21 no afectó al estilo de un equipo que desde hace años sabe a lo que juega. La marcha de Julen Lopetegui al Oporto y la llegada de Celades no cambió el sistema de España, que sigue jugando a dominar los partidos con posesión, toque y una dosis de fútbol directo profundo.

Ese estilo continuista lo intentó mantener Celades, que se estrenó en el cargo con casi todo el trabajo hecho. Lopetegui dejó la fase de grupos casi sellada.

El técnico alineó en su estreno a dos jugadores inéditos, Manquillo y Munir. Todos los focos estaban puestos en el atacante azulgrana, que, sin embargo, se contagió de la espesura española en la primera parte. Muniain desperdició un penalti a Deulofeu en el minuto cuatro y el propio Deulofeu le dio el gol del triunfo a Saúl Ñíguez.