El equipo español de natación sincronizada se quedó a 0,4837 puntos de obtener una nueva medalla en los Europeos de Glasgow: ese fue el margen que lo separó del podio en la final del ejercicio técnico, que ganó Rusia.

Las españolas ocupaban la tercera plaza con sólo dos equipos por competir, Italia y Portugal. Las italianas, con igual nota de 27,400 en ejecución, obtuvieron sin embargo una puntuación global de 90,3553, por 89,8716 de las entonces terceras, que se vieron desplazadas a la cuarta posición.

Y en natación, Hugo González fue el mejor de los españoles al acabar cuarto en la final de los 200 metros estilos, mientras que Jessica Vall y Marina García se clasificaron para la ronda definitiva de los 200 braza y Jimena Pérez, para la de 1.500 libre.

González marcó un tiempo de 1.58,77, a 81 centésimas del medallista de bronce, el británico Max Litchfield (1.57,96). El ganador fue el suizo Jeremy Desplanches (1.57,04), que superó al alemán Philip Heintz (1.57,83).

Vall se impuso en la primera semifinal con una marca de 2.25,94. Por su parte, García fue cuarta en la segunda semifinal, mucha más rápida que la primera. De hecho, su tiempo, 2.24,67, fue mejor que el de Vall.

También logró plaza de finalista, en su caso la de 1.500 libre, Pérez, que consiguió el sexto mejor sexto tiempo de las series preliminares (16.25,02).

Duane da Rocha se quedó a las puertas de las semifinales en los 100 espalda, y será primera reserva con un crono de (1.01,36). África Zamorano (1.02,11) y Cristina García (1.02,84) también participaron en las series preliminares.

Álex Ramos se quedó a 16 centésimas de lograr la plaza en las semifinales del 200 libre (1.49,50). En esta prueba también nadaron César Castro (1.49,63), Marc Sánchez (1.50,22) y Miguel Durán (1.50,31).